4 fotosOlimpiadas nazis en EE UUOlimpiadas nazis en EE UU 25 abr 2008 - 00:00CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceY a punto estuvo Hitler de perder sus ansiadas Olimpiadas con la prohibición de admitir a atletas judíos para competir en el seno del equipo alemán. En la imagen, un cartel de los Juegos Olímpicos de Berlín de 1936. La comisaria de la exposición, Susan Bachrach, no duda en afirmar que "la organización de los Juegos Olímpicos ofreció una extraordinaria oportunidad al régimen de Hitler para proyectar la ilusión de una Alemania tolerante y de paz, bajo el disfraz de cooperación internacional que brindaban los juegos". De este modo, el Führer enmascaró entre los preparativos deportivos una fuerte campaña propagandística del régimen, combinada con un reclutamiento de jóvenes atletas germanos como fuente de abastecmiento del ejército ario. Carteles coloridos aderezados con sutiles connotaciones racistas ilustraban el fuerte sentimiento olímpico-patriótico, que dejaba entrever la superioridad de la cultura alemana como la mejor heredera de la excelencia de la Grecia Clásica. Cartel de los Juegos Olímpicos de Berlín de 1936.EFECartel de los Juegos Olímpicos de Berlín de 1936.Cientos de familias de raza gitana fueron "limpiadas de las calles de Berlín", según órdenes de las autoridades del país, y recluidas en campos de internamiento de los suburbios de la ciudad, como el centro de Marzahn. En la imagen, un cartel de los Juegos Olímpicos de Berlín de 1936. Ni prohibiciones ni internamientos consiguieron evitar que el 'ego' del Führer se derrumbara con la victoria de dieciocho atletas afroamericanos, que incluyen al campeón de cuatro medallas de oro en Berlín 1936, Jesse Owens. La cara victoriosa de las XI Olimpiadas se refleja con la exhibición de medallas e instantáneas de los vencedores, entre ellos doce judíos de los equipos de Estados Unidos, Bélgica, Hungría, Austria, Canadá y Polonia y la germana Helene Mayer, la única representante judía del equipo nazi. Cartel de los Juegos Olímpicos de Berlín de 1936.EFEA escasos metros de la salida, aparece una imagen nevada de un campo de concentración que hiela con sus explicaciones la respiración de los visitantes. Se trata de diecisiete retratos en primer plano de deportistas judíos y gitanos que participaron en los Juegos Olímpicos de 1936, y que también fueron víctimas del racismo de Hitler durante la II Guerra Mundial. A la salida del 'zulo' que alberga la exposición, una gran oleada de luz natural convierte las titánicas paredes enladrilladas del museo en un espejismo de las masivas fábricas alemanas utilizadas como unidades de producción nazi. Un escenario apropiado para guardar las reflexiones de los visitantes, como antes hizo con las de los millones de judíos exterminados en el Holocausto. En la imagen, cartel de los Juegos Olímpicos de Berlín de 1936.EFE