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La emoción vuelve a la F-1

"Vuelve una leyenda"

El ex campeón Hamilton resume la revolución en la F-1 por el retorno de Schumacher con Brawn

La escudería Mercedes GP puso ayer punto final a largas e insistentes especulaciones al anunciar el fichaje del heptacampeón mundial Michael Schumacher para las próximas tres temporadas, por una cifra que ronda los siete millones de euros anuales. El piloto alemán, que cumplirá 41 años en enero, regresará a la fórmula 1 tras una ausencia de tres años en los que siguió colaborando con su último equipo, Ferrari. Schumacher se ha visto obligado a romper su compromiso con la escudería de Maranello, donde actuaba como asesor técnico de los coches de calle, para poder competir a partir de enero junto a su amigo e ingeniero, Ross Brawn, en un equipo que será totalmente alemán: Schumacher y Nico Rosberg como pilotos y la titularidad de Daimler Benz.

A los 40 años, el piloto ha firmado por tres temporadas, a siete millones cada una
"Le pregunté si estaba a punto y me dijo que sí. Y él es su mejor crítico", dice Brawn
La ruptura con Ferrari no ha sido amistosa. "Es otro Schumacher", dice Di Montezemolo
El heptacampeón mundial comparte equipo con su compatriota Rosberg
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"Si Michael ha adquirido el compromiso, no me cabe ninguna duda de que puede asumirlo", proclamó Brawn en el anuncio del fichaje del alemán, que se hizo público ayer por la mañana en la sede de Brackley, en Gran Bretaña. "Le pregunté si estaba a punto para regresar y me respondió que sí. Y él es su mejor crítico. Sabe muy bien de lo que es capaz. Creo en él a ciegas". El reencuentro entre estos dos números uno -cada cual en su especialidad- comenzó a materializarse durante el último Gran Premio de Abu Dabi, que ponía punto final al campeonato de este año. "Allí, Brawn me planteó la posibilidad de correr para ellos", explicó ayer Schumacher. "Sin embargo, en aquel momento no estaba todavía preparado. El fuego prendió unas semanas después. No voy a esconder que formar parte de un equipo alemán es tentador para mí. Y el hecho de poder trabajar de nuevo con Brawn en Mercedes es determinante. Pero por encima de todo eso, lo fundamental es que mi pasión por las carreras ha vuelto. De repente volví a sentir deseos de sentarme al volante de un F-1 y de participar en el Mundial, es algo que me excita y me inspira".

Schumacher lo intentó ya el pasado verano, cuando Ferrari le ofreció la posibilidad de sustituir a Felipe Massa, tras el grave accidente que sufrió el brasileño en el Gran Premio de Hungría. Entonces, el alemán aceptó el reto pero no pudo correr porque su cuello no podía soportar las fuerzas centrífugas generadas por un F-1. Ahora, sin embargo, el accidente que sufrió en Cartagena en febrero cuando se entrenaba con una moto está olvidado. "Tengo la seguridad al 100% de que mi cuello no va ser un problema", agregó Schumacher. "No he tomado esta decisión a la ligera. Fue difícil para mí, porque mi vinculación con Ferrari ha sido siempre muy fuerte. La mayor parte de mi vida en la F-1 la he pasado con ellos. Y eso ha creado un vínculo de solidaridad que no desaparecerá aunque nos enfrentemos en la pista".

Aunque el piloto alemán lo niega, la ruptura con Ferrari no ha sido amistosa. "Éste es otro Schumacher, no es el mismo; es otro el que ha decidido dejarnos y correr con Mercedes", declaró la semana pasada Luca Cordero di Montezemolo, presidente de Ferrari.". Sin embargo, tanto él como todo el mundillo de la F-1 se congratula por el regreso del heptacampeón mundial. "Es genial volver a tener a Michael en la F-1, es una leyenda", resumió Lewis Hamilton. "Será un buen regalo de Navidad para la F-1", indicó el ex campeón Mika Hakkinen. "No me sorprendería verle luchar por otro título", agregó Nigel Mansell, que ganó su última carrera en Adelaida con 41 años. "Puede volver a ganar porque tiene más fuerza que los rivales más jóvenes", coincidió Niki Lauda. "Era lo mejor que podía ocurrirle a la F-1", sentenció Bernie Ecclestone.

Incluso Nico Rosberg, compañero de Schumacher, afirmó que se alegraba. "Es fantástico tenerle de compañero. Supone un gran reto para mí ir por delante de uno de los mejores pilotos de la historia". De lo que no habló Rosberg es de lo que supondrá estar en un equipo con Schumacher, Brawn y Mercedes. Para la marca alemana, que había financiado toda la carrera de Schumacher hasta que entró en la F-1, contar con el heptacampeón supone la cuadratura del círculo. Y Brawn se plantea ya el reto de ofrecer el octavo título a Schumacher en otra escudería, luchando contra un equipo McLaren totalmente británico -con Hamilton y Button-, y con el potente equipo Ferrari, con Alonso y Massa. ¿Cuál será el papel de Rosberg? La respuesta: el 14 de marzo en Bahrein.

Michael Schumacher, en el podio de Monza tras vencer el GP de 2006 con Ferrari.
Michael Schumacher, en el podio de Monza tras vencer el GP de 2006 con Ferrari.AFP

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