'La Garota de Ipanema' cumple 40 años

Río no es la ciudad de la música de hace 40 años ni en sus playas existe ya aquel clima de fiesta y tranquilidad de los tiempos jóvenes de Vinicius de Moraes. Pero la ciudad carioca, una de las más bellas e inconformistas del planeta, no se olvidó de que ayer hizo 40 años del día en que fue interpretada por primera vez La Garota de Ipanema, la canción quizá más famosa y grabada en el mundo. Y lo celebró con exposiciones de fotos del show y de las portadas de los LP realizadas por César Villela, además del lanzamiento del libro Bossa Nova, de Artur da Távola. En el aún famosísimo bar Vinicius de Ipanema participó el conjunto de Os Cariocas.

Brasil no sería tan conocido hoy en el mundo sin La Garota de Ipanema, que cantaron todos los grandes del mundo, sobre todo los norteamericanos, y que acabó convirtiéndose en uno de los símbolos más expresivos de la cultura brasileña. Y pocas canciones en el mundo están revestidas de tantas leyendas aún sin descifrar, como la de quién fue la verdadera musa que inspiró la famosa canción. ¿Fue de verdad la bella Heloísa Eneida?, como defienden los estudiosos de la Bossa Nova, ¿o una bella carioca cuyos encantos seducirían hasta a un extraterrestre que aterrizase en la playa de Ipanema? Nadie lo sabe con certeza.

Lo que se sabe es cómo nació aquella noche del 2 de agosto de 1962 la primera interpretación de La Garota de Ipanema, con una conjunción de astros musicales que nunca volvería a repetirse: Tom Jombim, João Gilberto y Vinicius de Moraes. Lo cuenta Severino, hijo: aquella noche, en una de las reuniones en casa de Vinicius, João tomó la guitarra y dijo: 'Escucha esta musiquita', y comenzó a esbozar una melodía mientras Antonio Carlos Jobim lo acompañaba al piano. Vinicius y Jobim desarrollaron la idea y entraron en la historia de la música popular internacional.