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GIRO DE ITALIA

Induráin guarda la calma en una guerra de nervios

Carlos Arribas

Miguel Induráin (Banesto) fue ayer el patrón en la jornada más extraña del Giro. El ciclista navarro no perdió en ningún momento la calma en los kilómetros finales de una etapa que se desarrollaron como una guerra de nervios. Claudio Chiappucci (Carrera) atacó y, desanimado, tuvo que desistir. Franco Chioccioli (GB-MG) y Maurizio Fondriest. (Lampre) atacaron también. Lograron 44 segundos de ventaja que les hacen recuperar ilusiones. Buenas noticias para Induráin la víspera de los Dolomitas. El ruso Dmitri Konysliev (Jolly) ganó la etapa. Fue su segundo triunfo en este Giro...

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La explosión de energías ahorradas durante la primera mitad del Giro ha resultado en una carrera incontrolable y nerviosa. La inteligencia y el temple, sin embargo, acaban imponiéndose. Induráin, por ejemplo, vio cómo subiendo a la Rosina, un puerto largo, Chioccioli y Chiappucci se despendolaban. Uno más escandaloso que el otro. Chioccioli casi cayéndose por el manillar. Es su particular parto de ' los montes. Y aunque cobraban ventaja y se juntaban a Armand de las Cuevas (Banesto), que había saltado antes, Induráin ni se inmutó. Viajaba solo en el grupo selecto, nunca a más de 35 segundos del trío. Nadie de su equipo le acompañaba -"el fallo de Rué ha, sido preocupante", dijo luego rsu director, José Miguel Echávarri-, e Induráin hizo lo que había que hacer: ponerse a rueda y observar cómo el Mercatone Uno, equipo del líder, Leali, trabajaba para mantener la maglia rosa.Y a fe que la mantuvieron. Como condenados tiraron Zaina, Bordonalli y Giupponi -curiosamente, tres ex compañeros de Chiappucci en el Carrera-. Detrás, tranquilo, Induráin, y, a su espalda, Leali, y también Bugno, Fondriest y Argentin. Allí, el ganador de los dos últimos,Tour hizo de patrón.Vio cómo Roche, compañero de Chiappucci, incordiaba para molestar en cabeza. Se acercó y simplemente le tocó en el hombro con la mano. El irlandés reculé. Resumen: una guerra táctica de esperar y hacer tensarla situación hasta que alguien no aguante.

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Sobre la firma

Carlos Arribas
Periodista de EL PAÍS desde 1990. Cubre regularmente los Juegos Olímpicos, las principales competiciones de ciclismo y atletismo y las noticias de dopaje.

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