Clint Eastwood
El actor de 'Harry el sucio', elegido alcalde de su pueblo californiano
El actor norteamericano Clint Eastwood, de 55 años, es desde ayer, después de ganar por abrumadora mayoría las elecciones a este cargo, el nuevo alcalde de Carmel by the Sea, pequeña ciudad californiana de 4.700 habitantes, en la que el bueno por excelencia de los spaghetti western ha seguido fiel a sus orígenes culinarios y es dueño del restaurante The Hog's Breatt Inn. Como en sus más celebradas interpretaciones, Eastwood aplastó a sus enemigos, aunque esta vez no le hizo falta sacar su Colt calibre 45 del cinturón.
La pequeña ciudad de Carmel, en la que Eastwood reside desde hace 14 años, tiene poco más de 25 kilómetros cuadrados de extensión y está bañada por las aguas del Pacífico, al sur de San Francisco. Tiene un censo de 4.700 residentes permanentes, aunque hay en ella una nutrida población turística flotante, que acude durante los meses de vacaciones al Jardín de Dios, que es como los veraneantes conocen a la localidad.Desde hace varios años, Clint Eastwood mantenía con las autoridades municipales de su ciudad un agrio contencioso a causa de su petición de permiso para ampliar el restaurante de que es copropietario, ampliación a la que la señora Townsend se opuso tozudamente. El pleito municipal se le puso a Eastwood tan crudo e irresoluble últimamente, que no vio para acabar con él otra salida que ésta, digna de un western: puesto que la alcaldesa Charlotte Townsend no le arreglaba a su gusto las divergencias que mantenía con ella, Eastwood decidió hacerse alcalde él mismo y acabar así con la querella.
La operación ha costado al actor alrededor de 40.000 dólares, montante de lo que ha tenido que desembolsar para una campaña electoral que, dado su oficio, le ha salido baratísima, pues le ha proporcionado incontables beneficios en publicidad gratuita, pues Eastwood ha ocupado por este su bautismo político un alegre puesto en casi todos los periódicos del mundo.
Sin enemigos
La victoria de Clint Eastwood como en sus películas y sin necesidad de administrar ni un solo tiro o mamporro, ha sido aplastante, arrolladora. Ha obtenido 2.166 votos, que equivalen al 72% del censo, contra los 799 de la venerable señora Townsend, de 61 años, su principal rival en la refriega electoral.El tercer candidato al puesto de gran jefe blanco de Carmel by the Sea, un joven de 27 años llamado Tim Grady, se ha marchado con el humillante apoyo de sólo 31 votos, lo que, no obstante, es toda una victoria si se compara con la hazaña del cuarto candidato, a todas luces el villano de la película, un acaudalado hombre de negocios llamado Paul Laub, que, aunque se dio cuenta de la paliza que se le venía encima y alcanzó a retirarse astutamente de la bronca en el último minuto, fue no obstante agraciado con un botín de siete votos.
El actor, cuyas cuentas corrientes rebosan de millones de dólares, recibirá un sueldo de 200 al mes, por lo que ha prometido acudir al ayuntamiento "de vez en cuando". El flamante alcalde pretende sanear y agilizar los negocios de la ciudad, comenzando por el suyo propio, que, según todos los síntomas, será por fin ampliado.
Eastwood ha acusado a su antecesora de ultraconservadora -idéntica acusación esgrimió ella contra él- y aunque se considera amigo y admirador de su doble colega Ronald Reagan, aseguró que no tiene intención de aplicar a Carmel la política del actor presidente de Estados Unidos ni seguir sus pasos en el nuevo territorio que comenzará a explorar el día 15 de abril, día de su investidura: "Mi carrera política ha comenzado y acabará en Carmel", afirmó el actor ante los casi doscientos periodistas que, procedentes de todo el mundo, acudieron al poblado tras conocerse la westerniana batida electoral de Harry el sucio.
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