"Tengo la autoestima subida"
Pregunta. ¿Debo llamarle compañero del metal?
Respuesta. Bueno, Ignacio me cuadra mejor. Aunque sí, soy metalúrgico, y vengo de una larga trayectoria en el astillero en Ferrol.
P. Cuentan que es un ortodoxo de estricta observancia. ¿Se nota un poco talibán?
R. Es que, hoy por hoy, no sé lo que es la ortodoxia en este negocio. Soy sindicalista, soy de izquierdas. Pero talibán no sería el calificativo que me pondría.
P. Canta la Internacional puño en alto.
R. No me parece mal conservar algo de la estética. Pero sobre todo me preocupan los contenidos de los mensajes. He evolucionado muchísimo. Vengo de la ultraizquierda de la ultraizquierda.
P. Y ahora ha aflojado.
R. Bueno, un poco más moderado, más pragmático. Creo que ahora ejerzo más de gallego.
P. No apoya una huelga general, pero amenaza mucho con salir a la calle. ¿Es que tiene claustrofobia?
R. En absoluto. Además, estoy muchas veces en la calle. Creo que es más coherente lo que estamos practicando tanto Comisiones como UGT: dar una oportunidad al diálogo. Los problemas son de una complejidad desconocida y las soluciones han de consensuarse lo más posible.
P. ¿Echa de menos a su antecesor?
R. No. Tengo mucha ocupación para notar ausencias personales.
P. Hasta la suya a Fidalgo, se pensaba que la mayor puñalada de la Historia fue la de Bruto a César.
R. No me veo yo así [risa tenue], apuñalando a Fidalgo. Aquí ha habido una controversia en las ideas y en la concepción de la organización, y la mayoría, democráticamente, ha decidido que fuese yo el secretario general.
P. ¿Quién se le aparece más en sueños: él o el presidente de la patronal, Díaz Ferrán?
R. Afortunadamente, ninguno de los dos. Tengo un buen sueño, buen despertar, y no me siento sobresaltado por las noches.
P. Dicen que, desde su llegada, ha colocado a todos sus chicos. ¿Eso es inevitable en política?
R. ¿Mis chicos? Hay gente con una larga trayectoria en el sindicato. Y en esa colocación han entrado siete personas de la lista de José María Fidalgo, algo impensable en otras etapas de CC OO.
P. ¿Le gusta más Salgado que Solbes?
R. No me gusta ninguno de los dos. He tenido más relación con Salgado, porque la conozco desde hace 35 años. Lo que espero es que cumpla con el trabajo que le ha caído encima, que es difícil.
P. Últimamente ha mandado flores al ministro de Trabajo. ¿El amor es ciego o él irresistible?
R. No tengo yo esa idea de estarle mandando flores verbales, porque de las otras, ninguna, aunque cultivo muchas en casa. Tras las declaraciones del gobernador del Banco de España sobre las pensiones, el ministro hizo las suyas, y seguro que tiene datos más frescos. Los nuestros son muy parecidos a los del Gobierno, y por eso hemos coincidido.
P. ¿Los empresarios quieren sacar tajada de la crisis?
R. Hasta hace unos días no me cabía ninguna duda. Yo espero que hayan aprendido un poco desde la asamblea de CEOE.
P. ¿Encuentra más sexy a Fernández Ordóñez o a Díaz Ferrán?
R. No son mi tipo. Veo más echao p'alante a Díaz Ferrán. Pero no iría con ninguno de ellos a una fiesta.
P. Citando a Miguel Hernández, suele autodenominarse "gallego de lluvia y calma". ¿Cuál es su principal chaparrón?
R. La que está cayendo con el paro.
P. ¿Tiene el ego bien puesto?
R. Tengo la autoestima subida.
P. ¿Es cierto que ha propuesto que su pueblo pase a llamarse El Ferrol del Toxillo?
R. No, no. Joé, con uno ya hemos tenido bastante.
P. Era electricista. ¿Se le funden los plomos con frecuencia?
R. Creo que conservo la calma bastante bien. Ésa sí que es una característica mía importante, unida a la de la paciencia.
P. El pulpo, ¿a la gallega o como animal de compañía?
R. Prefiero el pulpo a la gallega. Además, me sale estupendo. En términos castizos, soy un poco cocinillas. Me encanta la cocina. Aquí [CC OO] y en casa.
P. ¿Tiene más empanada mental o de berberechos?
R. Prefiero la de berberechos y aligerar la mental, que a veces aparece, sobre todo cuando pasan las horas, uno está espeso y necesita salir al aire.
P. ¿Qué tipo de percebe le sienta peor?
R. Las personas planas. Las que no son capaces de esbozar una idea. Aquéllas que se empecinan en tener siempre la razón.
P. ¿Qué le gustaría hacer con CC OO?
R. Un referente social de primera magnitud. Animar a la gente a afiliarse por millones. La sociedad española necesita más articulación social de la que tiene.
P. ¿Usted de qué peca?
R. No lo sé. De modestia.
Videogalería: La última de los domingos
Perfil
Tiene 56 años y dos hijos, risa ligera y retranca gallega, y es un auténtico manitas, a tenor de las actividades que dice bordar, como las maquetas de barcos, la cocina -"no es porque lo diga yo: se me da bien casi todo, carne, pescado"- o la jardinería -"tengo buena mano"-. Le gusta leer (está con Azaña), el cine y el teatro, la bici, andar y correr, y se ha comprado una máquina "que hace de todo", que, hasta ahora, sólo usa para colgar la chaqueta.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.