"Pretendo no dar un solo disgusto a Mariano"
Con 49 años, dice que Mariano es "una experiencia imborrable en mi trayectoria personal". Antes de dar algunas respuestas, denota cierta inseguridad que no aparenta en la vida pública. Se queja de falta de tiempo, va al gimnasio por la noche, y confiesa que le gusta comer, sobre todo lentejas y la tortilla de patatas de su madre.
Pregunta. Hay que ver el gusto que le han cogido a manifestarse desde que están en la oposición.
Respuesta. Millones de españoles.
P. Y hasta cantan Libertad sin ira. Cualquier día les vemos con camisetas del Che.
R. No soy mitómana.
P. ¿Sigue siendo la niña bonita de Rajoy?
R. Yo soy una colaboradora y amiga de Mariano, que pretendo hacer con él como con mi padre: no darle un solo disgusto, darle alegrías y resolverle problemas.
P. Tengo la documentación suya llena de alabanzas al jefe. ¿Qué bolero le cantaría: Si tú me dices ven, Reloj, no marques las horas, Piensa en mí?
R. Ninguno de ellos es omnicomprensivo. Pero la aproximación podría ser Si tú me dices ven, lo dejo todo.
P. ¿Con quién jugaría a los médicos en la calle Génova?
R. En casa del herrero, cuchillo de palo. Y de niña tampoco jugaba a los médicos. Lo que más me gustaba eran los animales.
P. Pues no me atrevería a preguntarle con qué animales jugaría en Génova.
R. Ja, ja, ja. No sé contestar. Nunca me ha pasado esto.
P. ¿Preferiría ponerle el fonendo a Acebes o a George Clooney?
R. El fonendo es para auscultar, para ver patologías. Y tengo la impresión de que ni Clooney ni Ángel Acebes tienen patología pulmonar ni cardiaca.
P. Pasemos al termómetro. ¿Por qué tienen la temperatura tan alta en su partido?
R. Yo creo que la temperatura de la política es la que corresponde a quienes estamos viviendo en un país cuyo presidente del Gobierno nos ha colocado en muchos problemas que no teníamos.
P. ¿Es la señorita Rottenmeyer del PP?
R. Yo lo que soy es muy ordenada, y dicen que administro muy bien los tiempos, porque llevo mi agenda electrónica muy organizada, y me va saltando y avisando.
P. ¿No es un poco redicha?
R. Yo creo que todo lo contrario. Tal vez peco de utilizar un lenguaje muy llano. Alguien de mi familia me dijo: "No digas sostenibilidad, porque es una palabra que no entiende nadie". Y nunca he vuelto a decir sostenibilidad.
P. ¿De qué operaría al Gobierno?
R. Lo del Gobierno no se arregla con cirugía.
P. ¿Por dónde metería el bisturí al PP?
R. Yo no veo que el PP necesite arreglos.
P. ¿Cómo son los hombres?
R. Pues hay de todo. ¿Por qué me lo pregunta? Les veo hombres, fundamentalmente, je, je. O sea, con sus peculiaridades.
P. ¿El hombre ideal se encuentra en su partido?
R. Mi hombre ideal se encuentra en mi casa.
P. Es miembro del patronato de FAES. ¿Qué parte de culpa tiene de lo que sale de la boquita de Aznar?
R. A José María Aznar le veo como un señor que dejó la presidencia del Gobierno, no volvió a presentarse, y lo que hace es opinar sobre lo que él entiende que puede hacerlo.
P. Su compañero Gabriel Elorriaga la ve como la Castafiore de Tintín. ¿Qué se canta usted?
R. Me gusta mucho la música y canto cuando estoy sola, en la intimidad, porque canto bastante mal. Y no me he atrevido con el género operístico. Lo que más hago es oír música.
P. Dijo de sí misma que tiene buen humor y espaldas anchas. ¿En qué se lo nota?
R. Buen humor, en que cada vez me afectan menos las cosas que no son positivas, y que me tomo casi todo con una cierta distancia. Espaldas anchas, deben de ser los años.
P. ¿Se considera mujer-mujer, de las que le gustan a Aznar?
R. Yo me considero una mujer. Una mujer de mi tiempo.
P. No es usted nada lúdica. Parece más bien planita.
R. Mi problema es que no tengo tiempo. Voy al gimnasio, viajo cuando puedo, soy una lectora empedernida, sobre todo de la historia de la medicina. Y lo paso bien. Vivir es un placer.
P. Pero de protagonizar una peli porno con mucho cuero nada, ¿no?
R. Pues... La verdad es que no. Yo, como me dicen que me parezco mucho a Meryl Streep, protagonizaría Memorias de África.
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