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OPINIÓN
Columna
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Todos somos Google

Javier Sampedro

¿Cuántos segundos tiene un año? Déjate de calculadoras. Mete "segundos año" en Google y verás al instante (en 0,15 segundos, para ser exactos) que "un año de 365 días tiene 31.536.000 segundos". La respuesta pertenece a Yahoo Answers, un servicio de la competencia, pero eso da igual, porque tú, yo y Yahoo Answers tenemos una cosa en común: todos estamos en Google.

Una típica pregunta por estas fechas: "Oye, ¿cuánto es 90 partido por el cuadrado de 1,70?". Se trata de tu cuñado, que acaba de pesarse en la báscula de baño y quiere saber su índice de masa corporal. Tú metes en Google "90/(1,70)^2" y le respondes: "Estás feo de gordo, cuñado". Suele ser eficaz. Lo mismo para convertir metros en pulgadas, millas náuticas en kilómetros o cientos de miles de dólares en millones de euros.

¿Han acabado ya las navidades? La mejor forma de saberlo es meter "regalos" en Google Trends. Esta herramienta muestra la cantidad de búsquedas de un término -regalos, en este caso- que hace la gente en Google a lo largo del tiempo. "Regalos" es el paradigma de ritmo anual, con un acusado pico cada Navidad. El pico de este año ya se ha pasado, así que debemos concluir que sí, que las navidades ya se han acabado. Pero no te relajes mucho, porque el segundo pico anual de "regalos" llega en febrero. Será el amor, quizá.

Otros trends son más difíciles de interpretar. El buey irlandés alcanza el máximo anual en la primera quincena de marzo, por poner un ejemplo sin el menor interés práctico. Las búsquedas de "empleo" siguen un ritmo semanal: florecen de lunes a jueves y se marchitan de jueves a lunes. Tiene sentido, salvo que las búsquedas de "desempleo" siguen exactamente el mismo ritmo.

Supongamos que un músico se acuerda de do re mi, pero no sabe seguir. Lo que necesita es Google Sets: le metes do re mi y te devuelve fa sol la si. Si le metes Recaredo y Chindasvinto, te devuelve Rodrigo y Recesvinto, lo que es muy notable. También devuelve Codorniú y Freixenet, lo que es más notable aún. Con John y Paul deduce George y Ringo, aunque también Astérix, el galo. Y Katie y Moxie, que no sé de dónde son.

La reputación ya no es la "consideración en que se tiene a alguien o algo", como dice el diccionario. Es su posición en Google. Lo segundo puede coincidir con lo primero, pero hay toda una industria emergente que se dedica a intentar evitarlo. Es el sector de la optimización en motores de búsqueda (SEO, por Search Engine Optimization), que ofrece a sus clientes una panoplia de estrategias más o menos aceptables -de sombrero blanco o negro, en la jerga- para subir puestos en el ranking de Google.

Una de las técnicas de sombrero negro más populares es el mareo de artículos (article spinning). Consiste en bombardear la Red con toneladas de versiones de un artículo donde se elogie tu negocio, por ejemplo. Las versiones deben diferir lo bastante como para no mosquear al detector de mareo de artículos de Google. Lo último en este campo es ContentBoss (http://www.contentboss.com), un programa para producir en masa plagios indetectables.

Por ejemplo, toma el texto: "Muchos planes de salud dental empiezan pagando el 100% sólo después de haber hecho cierta cantidad de trabajo". Y lo convierte en: "No pocos proyectos de salud dental empiezan por pagar el cien por cien únicamente tras una cantidad de trabajo concreta". Eso sube tu reputación por las nubes.

El Nexus One, nuevo teléfono móvil de Google.
El Nexus One, nuevo teléfono móvil de Google.AP

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