Penas de hasta 26 años para los asesinos de Leónidas Vargas
El juez condena a los siete miembros de la banda que mató al narco colombiano en la cama del hospital 12 de Octubre
Jonathan Andrés Ortiz entró la tarde del 8 de enero de 2009 en la habitación 543 del hospital 12 de Octubre y descerrajó varios disparos con una pistola semiautomática al narcotraficante colombiano Leónidas Vargas, tras preguntar al compañero de cama. Estos balazos le causaron la muerte en el acto, al provocarle un shock hipovolémico y una hemorragia aguda masiva. El crimen lo cometió "de forma sorpresiva e inesperada". Así lo considera demostrado el presidente de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial, Carlos Ollero Butler, que condena a Ortiz a 25 años y nueve meses de prisión por un delito de asesinato agravado y otro de tenencia ilícita de armas. Los otros seis integrantes de la banda tendrán que responder a penas de prisión que oscilan entre los cuatro años y un día a los 26 años y tres meses.
El sicario descerrajó varios disparos con una pistola semiautomática
La sentencia, que consta de 84 folios y contra la que cabe recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, se ha basado en el veredicto del jurado que ya consideró culpables de los delitos de los que eran acusados a los siete imputados. En el relato de hechos, el magistrado considera demostrado que José Jonathan Fajardo Ospina era el jefe de una oficina de cobros, encargada de ejecutar crímenes por encargo. Este fue quien recibió la solicitud de matar al narcotraficante Leónidas Vargas por parte de terceras personas que no han sido identificadas en el proceso. Para ello, contactó con su lugarteniente Edgar Andrés Ortega Flores y con Yuli Carolina Oliveros Rojas. Esta vecina de Torrejón de Ardoz fue quien telefoneó a Ortiz y le compró el billete de avión para que viajara desde Puerto del Rosario (Fuerteventura) hasta Madrid. También estuvo en su casa en las horas previas al crimen, según el fallo.
Otros tres que también participaron en el crimen fueron Edgar Andrés Ortega Flores, encargado de vigilar la habitación de Leónidas Vargas y de esperar a Ortiz en la entrada del hospital; Jonathan Montoya Rendón, que llevó al pistolero hasta la cama del narcotraficante y consiguió la pistola de fabricación rusa, y Alexander Salazar Cortés, que preparó el crimen, proporcionó el arma al asesino y le ocultó en su casa tras la muerte de Vargas, según la sentencia de la Audiencia Provincial. El último condenado es Andrei Alexander Cadar, que recibió el encargo de deshacerse de la pistola arrojándola a un río. Por ello recibió una gratificación económica de al menos 1.000 euros. Le condenan por encubridor de asesinato y por tenencia ilícita de armas a una condena de cuatro años y un día.
La segunda pena más baja ha correspondido a Yuli Carolina Oliveros, que tendrá que pasar 10 años y seis meses por ser cooperadora necesaria de un delito de homicidio. La sentencia considera que ella desconocía la forma y la persona a la que iba a matar Ortiz. El fallo cree demostrado que fue ella quien compró el billete para que viajara a Madrid el asesino. La condena más alta le ha caído a Edgar Andrés Ortega (26 años y tres meses) porque se resistió al ser detenido por la policía, lo que supone un delito de atentado. El juez le considera cooperador necesario del asesinato de Vargas, al igual que el dirigente de la oficina de cobro, que cumplirá 23 años y seis meses. Los otros dos (Montoya Rendón y Salazar Cortés) ven ampliada su pena hasta los 24 años y tres meses. Los siete tendrán que indemnizar a los familiares de Vargas con 104.837,52 euros.
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