El 'ozono malo' empieza a dispararse

Llega el buen tiempo a Madrid, las altas temperaturas, el sol fuerte... y por culpa de todo eso y de la alta contaminación del tráfico, el ozono. Es el contaminante del que menos se habla, pero no es menos perjudicial para la salud que el dióxido de nitrógeno o las partículas en suspensión. El ozono troposférico (conocido como ozono malo, frente al bueno, el estratosférico, que hace de filtro de la radiación ultravioleta) se comporta al revés que los otros contaminantes.

No se le espera en zonas como el eje de la Castellana, sino en lugares tan poco sospechosos de tener aire sucio como la sierra o la Casa de Campo. Se produce tras una reacción fotoquímica: cuando hay mucha contaminación por óxidos de nitrógeno (que salen de los tubos de escape) y el sol pega fuerte, aparece el ozono. Una quincena de estaciones de medición madrileñas han superado estos días el umbral de protección a la salud, denuncia Ecologistas en Acción.

Las estaciones pertenecen tanto a la red del Ayuntamiento de Madrid como a la de la Comunidad. En los dos últimos días, los altos niveles de ozono troposférico han llevado a superar los 120 microgramos por metro cúbico como media en ocho horas. La legislación permite 25 superaciones al año de este índice. Los puntos en los que se ha superado, según la organización ecologista, que a su vez consulta datos oficiales, están en Alcalá, Fuenlabrada, Torrejón, Alcorcón, Colmenar Viejo, Majadahonda, Arganda del Rey, San Martín de Valdeiglesias, Guadalix, Algete, Atazar y Orusco. En Madrid capital, las estaciones que han sobrepasado el límite octohorario son Barajas, Ensanche de Vallecas, El Pardo, Juan Carlos I y Tres Olivos. En todos estos casos, se trata de zonas periféricas y alejadas del tráfico intenso del centro.

Ecologistas en Acción considera que "ambas administraciones no actúan adecuadamente tanto para informar a la población como para evitar o paliar la producción de esta contaminación", según han hecho público en un comunicado. La organización "desaconseja la actividad física intensa, tanto deportiva como laboral en las horas centrales del día". El comunicado añade que "es esencial que las administraciones adviertan a la población de la presencia de este contaminante, que no se visualiza pero afecta intensamente al sistema respiratorio".

Usar el transporte público

La única alerta que la Comunidad de Madrid tiene activa en su página web es la que avisa de una intrusión de masas de aire africano sobre buena parte de la península para mañana. La Consejería de Medio Ambiente recomienda a la población la utilización del transporte público "con objeto de reducir los niveles de partículas en el aire".

Los altos niveles de ozono, que ahora mismo hacen que varias estaciones de la red de Madrid capital aparezcan en el mapa en color amarillo (calidad del aire admisible), aún no han obligado a la Comunidad a emitir ningún aviso. El llamado "umbral de información" por ozono, que obliga a las Administraciones a informar a los ciudadanos, está fijado en 180 microgramos por metro cúbico. Cuando se llega a ese nivel, la recomendación que se hace a los grupos de riesgo (niños, ancianos, personas con problemas respiratorios) consiste en "no permanecer al aire libre ni hacer esfuerzos prolongados al sol y evitar el contacto con alérgenos (polvo, polen, animales)".

El año pasado se produjeron muchas superaciones de ese umbral en la Comunidad de Madrid. Solo hasta finales de julio la Administración tuvo que lanzar el aviso a la población en 14 ocasiones. Sin embargo, el año anterior no se superó el nivel en todo el verano.