Puig replica a la DGT que el límite de 80 km es solo "una medida ambiental"

El consejero de Interior, Felip Puig, cree que la medida de limitar la velocidad a 80 kilómetros por hora en los accesos a Barcelona, impulsada por el anterior Gobierno, no tiene que ver con la reducción de accidentes de tráfico. A su juicio, es solo "una medida ambiental", y como tal nació desde el anterior departamento de Medio Ambiente. Puig ha replicado así las críticas que ayer vertió el responsable de la Dirección General de Tráfico (DGT), Pere Navaro, quien alertó ayer al Gobierno catalán de que suprimir la medida puede provocar un aumento de los accidentes de tráfico.

"El señor Navarro se ha confundido. El límite de 80 no se implantó por un tema de seguridad vial, sino para reducir la contaminación", ha alertado Puig. El ejecutivo maneja, en ese sentido, diversos informes (internos y externos) que indican que la contaminación en el área de Barcelona se reduce, pero no gracias a la limitación de 80 por hora en las carreteras, sino a otros factores. Los mismos informes indican, según fuentes de Interior, que la siniestralidad no se reduce de forma significativa en la llamada zona 80 si se compara con otras vías.

Aunque Puig no ha detallado qué alcance tendrá la supresión de los 80 por hora -una de las medidas estrella del tripartito- lo cierto es que no será total, sino parcial. La idea es que se aplique cuando hay mayor congestión de tráfico y se flexibilice en los momentos en los que circulan menos vehículos. "El señor Navarro debe de estar muy nervioso, porque no veo que la medida esté en vigor en todos los lugares de España", ha añadido Puig para responder al director de la DGT.