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Derribos de casas, compra de fincas

El 30 de octubre de 2006, la Dirección General de Costas comenzó uno de los mayores derribos de viviendas en la zona pública de costa. En el término municipal de El Sauzal (en Tenerife) demolió 418 viviendas de mala calidad y utilizadas para los fines de semana que ocupaban 2.191 metros de costa. Aunque Medio Ambiente afirma que los derribos se hicieron con acuerdo de los vecinos, éstos se manifestaron y las máquinas tuvieron que trabajar escoltadas por la Guardia Civil. Ahora construye allí un camino peatonal de 1,5 kilómetros.

Desde 2004, Medio Ambiente ha demolido otras 337 edificaciones. En muchos casos se trata de chiringuitos o pequeñas construcciones. Sólo en casos excepcionales se trata de grandes obras. Es el caso de las antenas de Radio Liberty, desde las que Estados Unidos emitía propaganda hacia los países del Este, en Girona. A menudo, son pequeñas casas de pescadores las que caen.

El Gobierno prepara desde hace más de un año un camino para hacer accesible un tramo de tres kilómetros de costa de Mallorca que un grupo de millonarios "ha privatizado de hecho", en palabras del director general de Costas, José Fernández. En esa zona tienen sus casas Ana Obregón, Carlos Sáinz o Pedro J. Ramírez.

Además de los derribos, el ministerio ha acelerado el plan de deslindes (el trámite que delimita la zona pública y la privada de costa). En teoría, es sencillo trazar la línea sobre el mapa, pero en la práctica el trámite tarda años. Primero hay que hacer estudios técnicos para ver hasta dónde llega el agua en caso de grandes temporales. Luego, los vecinos afectados suelen pleitear cuando ven que sus terrenos, para los que preveían enormes ganancias, quedan incluidos como dominio público.

El trámite debía estar concluido a lo largo de toda la costa en 1993 pero aún falta el 20% unos 2.000 kilómetros de costa, por deslindar. Entre 1988 y 2003 el ritmo de deslinde fue de 360,9 kilómetros al año de media. En este año ya se han concluido más de 600 kilómetros, según el Ministerio de Medio Ambiente, que prevé concluir los deslindes en 2008.

Aunque trazar la raya parece una formalidad es imprescindible. Sin deslinde "no se puede resolver un expediente sancionador por una ocupación indebida", según el ministerio.

La tercera pata de la política de Costas es el programa de adquisición de terrenos para protegerlos de la especulación urbanística. El Gobierno ha tasado 32 fincas (en total 19,5 millones de metros de metros cuadrados) en 105.854.789 euros. Si consigue comprar esos terrenos será un chollo ya que el metro cuadrado sale a 5,4 euros.

Entre las fincas que el ministerio quiere comprar se encuentra la del Hotel del Algarrobico, pero la parte que pretende expropiar sólo ocupa la mitad del hotel. El Gobierno ha ofrecido 30 millones a la promotora a cambio de tirar todo el hotel y quedarse la mitad del terreno. Después el constructor podría construir en la mitad de la finca (y en los alrededores que ya son urbanizables). La ley permite al Gobierno comprar terrenos más allá del dominio público para asegurarse su conservación.

El pasado 24 de octubre, el Gobierno anunció la compra de la isla de Sálvora y los islotes de Noro y Vionta, situados en la desembocadura de la Ría de Arousa (Pontevedra), para su incorporación al Dominio Público. La inversión ascendió a 8,5 millones.

Medio Ambiente se ha garantizado el derecho de tanteo sobre las miles de hectáreas, muchas de ellas en desuso, que Defensa conserva en el litoral. Gracias a este acuerdo ya compró 300 hectáreas en Murcia por ocho millones de euros. El terreno estaba ya cercado por los promotores, que vieron cómo el acuerdo desvanecía sus aspiraciones inmobiliarias.

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