Aguirre: "El espionaje político es seña de identidad del PSOE"

La presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, ha hecho gala este jueves del lema de que la mejor defensa es un ataque. Tras negar el escándalo del espionaje político destapado por EL PAÍS y abrir una comisión en la que duda que se hallen responsabilidades, ahora viene el y tú mas. Durante la sesión de control en la Asamblea de Madrid, Aguirre ha afirmado que el PSOE "tiene como seña de identidad el espionaje político" y ha asegurado que este partido ha realizado seguimientos irregulares en los años ochenta, noventa y recientemente. En un duro intercambio de críticas, la oposición le ha dicho que está en el momento más duro de su gobierno y que "llegó bajo sospechas [en referencia al tamayazo y saldrá igual".

En su contraataque, Aguirre ha sostenido que en 1984 el PSOE "creó un gabinete de espionaje político para espiar a los de su propio partido, a los de Alianza Popular y a los comunistas" y que en 1995 su "creador", el entonces ministro de Defensa y vicepresidente del Gobierno Narcís Serra "tuvo que dimitir por espiar desde el Rey para abajo". Tras insistir en que su Gobierno "no tiene nada que ocultar", la presidenta ha señalado que en la trama de espionaje a políticos en la Comunidad de Madrid lo único "cierto" es que ha habido "18 portadas nacionales de un periódico diciendo que el Gobierno de esta comunidad espía, acusaciones que han sido desmentidas más tarde por su autor a la salida de la Fiscalía".

La presidenta de Madrid utiliza la manipulación de una frase pronunciada por el periodista de este diario que destapó el escándalo, Francisco Mercado. Dicho redactor aseguró, tras ser citado como testigo en la investigación del caso, que existían indicios de la existencia de una trama de espionaje anclada en la Consejería de Interior de Madrid, pero que, por el momento, las investigaciones periodísticas no aportaban pruebas de la implicación personal de la presidenta o del vicepresidente de la Comunidad de Mardid, Ignacio González. Aguirre ha dedicado gran parte de la sesión a culpar de espionaje al PSOE y ha dicho que "sigue abierta una causa porque en 2003 escucharon los teléfonos del PP de Madrid y el juez ve indicios de delito" y que "se ha probado que agentes del CNI espiaron a Manuel Pizarro (diputado nacional del PP) en junio de 2007". "Es usted muy valiente, señora Menéndez. Bienvenida al club de los que creemos que estos espionajes son intolerables y no estamos dispuestos a aceptar que los derechos y libertades sean conculcados. Es usted la primera en la historia de su partido que se preocupa por nuestro derecho a no ser espiados", le ha espetado Aguirre a la portavoz del PSOE.

ya tiene "escrito el dictamen de la comisión"

La socialista Maru Menéndez le había preguntado previamente si considera que existen responsabilidades políticas en la trama, a lo que Aguirre ha contestado que lo tendrá que "juzgar" y "esclarecer" la comisión de investigación -aunque cuando le dio su visto bueno dijo que dudaba de que se fueran a hallar-. Menéndez le ha dicho que "a la hora de mentir ante el "hecho más grave" sucedido en la comunidad podían ponerse de acuerdo" todos los representantes del PP para "no volver locos" a los demás, y ha hecho hincapié en que miembros de su mismo partido, como el vicealcalde Manuel Cobo y el ex consejero y diputado regional Alfredo Prada "son los que han hablado directamente de responsabilidad en los hechos de la Consejería de Interior". "Llegó bajo sospechas y saldrá igual", ha sentenciado.

Le ha reprochado también que, desde que hace un año se mostrara dispuesta a abandonar el Gobierno regional para concurrir en la lista de Mariano Rajoy al Congreso y se produjera la "fractura interna" en el PP, los madrileños estén sufriendo su "ambición desmedida y su lucha por el poder y por el dinero". Menéndez se ha mostrado convencida de que el PP, "fruto de un pacto interno", tiene ya "escrito el dictamen de la comisión de investigación" y "no tiene voluntad de esclarecer los hechos". Por su parte, la portavoz de IU, Inés Sabanés, le ha dicho a Aguirre que su grupo está "dispuesto cruzar el desierto aun sin cantimplora, para saber la verdad de lo que aquí ha sucedido". "Tengo la convicción de que usted se está enfrentando a uno de los momentos más duros de su gobierno, porque recaen sospechas muy serias y firmes, y las tramas de espionaje se suelen montar contra algo y por algo en momentos de deterioro y descontrol", ha agregado la portavoz de IU.

Sabanés ha aprovechado además para lanzar un cuestionario a la presidenta, con el fin de que ésta dijera expresamente si "sostiene que nadie de la Consejería de Interior ni relacionado ha podido intervenir en la trama" y si "responde por todos sus consejeros", y para que explicara "quién la persigue" y "de quién es víctima". En respuesta, Aguirre ha asegurado -por enésima vez desde que estalló la crisis- que quiere "claridad, luz y taquígrafos" y que "nadie ha organizado espionajes, ni los ha amparado, ni ha tenido conocimiento de ello". En su debate con Sabanés, la presidenta ha criticado que IU "preste ayuda al PSOE" en este asunto, "después de haber sido espiado también por ellos", y que "se dedique a seguir informaciones mentirosas en lugar de pedir responsabilidades a un Gobierno que manda al paro a 7.000 trabajadores al día".