Montilla replica a Solbes que no aceptará un "mal acuerdo"
El titular de Economía adviertió ayer al Gobierno catalán que si no había acuerdo decidiría el Estado
El presidente catalán, José Montilla, ha advertido este viernes al Gobierno español de que no aceptará que se imponga al gobierno catalán un "mal acuerdo" de financiación. Montilla ha aprovechado el encuentro que organiza cada año en Vilopriu (Girona) la entidad Nou Cicle, que reúne al sector más catalanista del PSC, para replicar al vicepresidente Pedro Solbes, quien ayer aseguró que si se mantiene el desacuerdo sobre la financiación prevalecerá el criterio del Gobierno.
"No aceptaremos un mal acuerdo. No nos levantaremos de la mesa, pero tampoco aceptaremos ninguna imposición. No se puede responder con imposiciones a las razones de Cataluña. No se puede hacer y no dejaremos que se haga", ha espetado Montilla.
El presidente catalán ha reconocido la necesidad de "ser flexible" y, aunque ha calificado la propuesta de financiación del Gobierno español como "insuficiente, inconcreta", porque no recoge lo que dice el Estatuto, ha expresado su convicción de que el acuerdo en financiación llegará y de que entrará en vigor en 2009. Los partidos catalanes han criticado hoy sin excepciones la intervención de Solbes.
Esta mañana, la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega ha asegurado que en tres meses llegarán a un acuerdo en torno a la financiación.
El "tono" de Solbes
Desde el PSC, su secretario de organización, José Zaragoza, ha afirmado que los socialistas catalanes "no esperaban nada del debate de ayer" y que una comparecencia de este tipo "no ayuda a la negociación, porque es una negociación entre Gobiernos, bilateral". Según Zaragoza, el tono de Solbes "no fue el adecuado" y ha añadido que no compartía el comentario de éste en el sentido de que Cataluña no es ni la primera ni la tercera autonomía con más dificultades de financiación.
Por su parte, el líder de CiU, Artur Mas, ha calificado la postura del Gobierno central respecto la financiación de "una inmensa deslealtad y de una tomadura de pelo monumental" porque el Estatuto es una ley aprobada que contiene un nuevo modelo de financiación "y se tiene que cumplir". Mas también ha destacado que Solbes "no puede imponer un modelo de financiación" y que "la posición de ayer de Solbes fue extremadaente dura", aún más que la mantenida por el Gobierno de Zapatero antes de las vacaciones.
El presidente de ERC, Joan Puicercós, ha dejado claro que la comparecencia de ayer de Solbes demostró "el colapso" del nuevo Estatuto y del sistema de financiación que incluye, y ha remarcado, en alusión al Gobierno, que "los que recortaron el Estatuto con la excusa de que lo cumplirían, no lo están cumpliendo". En el caso de ICV, su secretario general, Jordi Guillot, ha considerado "frustrante" la comparecencia del vicepresidente económico y se ha mostrado preocupado por la actitud de Solbes, en su opinión "poco dialogante, conflictiva y enrocada".
Aún así, Guillot no se arrepiente de haber evitado que fuera el propio Zapatero quien diera explicaciones sobre el asunto, en referencia a la retirada de solicitud de comparecencia después de que su partido hubiera alcanzado un pacto con la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega. La presidenta del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, ha criticado también "las amenazas" de Solbes y considera que "estos ataques demuestran la incapacidad del PSOE para llegar a acuerdos con todas las comunidades autónomas". A pesar de estas críticas, la líder del PP catalán ha rechazado vincular los presupuestos del Estado con la negociación de la financiación, ya que "no deben ser moneda de cambio para nada, y menos en un contexto de crisis económica".
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