El Valencia no reacciona
Osasuna encandena su segunda victoria en Pamplona y sale del descenso
Ya lo decía José Antonio Camacho. Si las condiciones meteorológicas acompañaban, Osasuna enseñaría los dientes. Y así sucedió. El clima y el terreno de juego colaboraron y Osasuna demostró que el hasta ayer farolillo rojo también tiene toque y, sobre todo, desborde. Moretti sucumbió una y otra vez ante su principal exponente: Juanfran. La banda derecha del estadio Reyno de Navarra tiene nombre y matrícula. En apenas dos minutos de partido ya había empezado a producir. La primera asistencia de Juanfran la remataba Plasil sin fuerza a las manos de César.
Le costó al conjunto de Unai Emery encontrar su sitio. Y para cuando lo hizo ya se le habían escapado tres cuartas partes de partido. Sólo Villa y Silva eran capaces de vislumbrar la portería pamplonesa. Un tímido disparo de Villa a balón parado fue la acción más peligrosa del ataque valencianista en la primera mitad. La conexión entre la medular y la línea ofensiva no cuajaba. Tan sólo Baraja en alguna arrancada era capaz de desatascar el enredo.
Osasuna 1 - Valencia 0
Osasuna: Roberto; Azpilicueta, Sergio, Miguel Flaño, Monreal; Puñal, Vadocz; Juanfran
Valencia: César; Miguel, Albiol, Marchena, Moretti; Albelda (Fernandes, m.79), Baraja; Angulo (Morientes, m.67), Silva, Mata (Vicente, m.67); y Villa.
Gol: 1-0, m.57: Miguel Flaño.
Árbitro: Carlos Velasco Carballo (Comité Madrileño). Amonestó a Miguel Flaño (m.22), Pandiani (m.31), Puñal (m.38), Dady (m.90), Roberto (m.92) y Vadocz (m.94), de Osasuna, y a Albelda (m.17), Marchena (m.51), Albiol (m.90), Fernandes (m.94) y César (m.94), del Valencia.
Incidencias: Encuentro de la vigésima segunda jornada de Liga celebrado en el estadio Reyno de Navarra ante 18.128 espectadores.
Enfrente Puñal y Vadozc se dedicaban a buscar una y otra vez las bandas. Plasil encontró más oposición en la banda izquierda con Miguel. Aun así, el Valencia de esta temporada sigue sin recordar a aquel equipo infranqueable, capaz de resguardar su portería durante meses. Masoud fue quien más se aprovechó de esto. El único iraní sobre el campo (Nekounam fue expulsado ante el Mallorca y estaba sancionado) encontraba huecos con demasiada facilidad. Y en una de sus internadas maduró la colecta pamplonesa. Albelda cometía falta y la ejecución magistral de Puñal encontraba la cabeza de Miguel Flaño, que, libre de marcaje, remataba a placer el balón.
Sin embargo, en ningún momento el Valencia dio la sensación de equipo incapaz. La sociedad Villa-Mata no precisa más de tres pases para cercar la portería rival. Sin embargo, hoy no estaba uno de sus aliados favoritos: Joaquín. El extremo se quedó en Valencia aquejado de gripe y cedió su puesto a un desaparecido Angulo, que no cumplió. Más preocupado en tareas defensivas, apenas acompañó en el ataque y fue sustituido por Vicente. La quinta derrota consecutiva fuera de Mestalla comienza a ser ya una losa demasiado pesada para Emery. Lo intentó el Valencia de todas las maneras. Metió músculo y llegada con Fernandes en el centro del campo y altura con Morientes en el ataque. De nada sirvió. La defensa pamplonesa resistió los envites con sobriedad. Sergio, titular de nuevo en el centro de la zaga, pudo con Villa por bajo y con Morientes por alto. El botín era demasiado importante. Dejar atrás las llagas de los puestos del descenso no tiene precio en Pamplona. Ziganda lo sabe mejor que nadie. Con la de ayer, Osasuna encadena dos victorias como local que le sirven para abandonar los puestos de descenso y aumentar la racha desastrosa del Valencia a domicilio.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.