El aprendiz ya es el mejor
Keita se confirma como el futbolista más completo del Barça al inicio de curso tras estudiar durante un año el juego del equipo
"¡Ya lo avisé! ¡Yo lo dije!", exclama Dani Alves y se golpea el pecho. "¡Lo avisé el año pasado! ¡El bueno que el Barça fichaba del Sevilla no era yo, era él", insiste el lateral brasileño. Habla, claro, de Seydou Keita, centrocampista maliense (Bamako, 1980), el mejor jugador del Mundial sub 20 de Nigeria 1999, ganado por la España de Xavi, por el que el Barcelona pagó 15 millones de euros al Sevilla, su cláusula de rescisión, para sustituir a Deco. Txiki Begiristain no olvida que entonces se le reprochó rebajar la calidad de la plantilla. Pero Keita ha resultado una incorporación tremendamente buena, dentro y fuera del campo. "No juega como juega por ser buena persona", se rebela Tito Vilanova, ayudante de Pep Guardiola, que le considera un futbolista "muy fuerte, muy inteligente, muy completo".
Generoso y buena persona, se dedicó a ver los partidos con los ojos de Messi o Xavi
Xavi le conoce desde el Mundial nigeriano. Lo ganó España, que eliminó a Mali en las semifinales, pero Keita fue elegido el mejor del torneo, lo que motivó las quejas de la delegación española. Xavi le recuerda con admiración, pero asegura que ha cambiado su forma de jugar para asumir el estilo del Barça de forma impresionante. "Ha cambiado porque el juego del Barça lo exige: el interior, la posición, el apoyo, la llegada...", advierte. "Parece que lleve aquí desde niño".
No siempre fue así. A Keita le costó leer la partitura cuando llegó el año pasado al Camp Nou. Fue uno de los primeros jugadores que pasó por el despacho de Pep Guardiola, que le puso vídeos para que entendiera que tenía que correr menos y con más sentido. Se dedicó a ver los partidos con los ojos de Messi o los de Xavi. No seguía la pelota. Les seguía a ellos. Para entender.
Muchas veces, terminado el encuentro o al día siguiente, Keita se citaba con el entrenador para que le aclarase las dudas. Y dio el paso para cambiar su juego: "Antes tenía que perseguir la pelota. Aquí, la pelota te llega", explica para definir el juego del Barça.
"Keita va en moto", dice Piqué. Las mismas palabras las empleó Vilanova en la pretemporada de Marlow. De hecho, a Guardiola y él les bastó con la primera semana de trabajo para comprender que el éxito en el inicio de la presente temporada pasaba por él. "Está a un nivel impresionante", reconoció el técnico antes de la Supercopa española, contra el Athletic. "Es un portento. A veces criticamos a la secretaría técnica, pero a éste lo trajeron ellos y es un acierto muy grande. Es fantástico", enfatizó Guardiola, que reconoce abiertamente que Keita le tiene el corazón robado: "Su generosidad no tiene limites. Es capaz de decir que no quiere jugar la final de la Copa de Europa porque no ha jugado nunca de lateral y no quiere perjudicar al equipo".
Además, sostiene, "ha evolucionado muchísimo": "Trabaja; ha mejorado en el juego aéreo; nos da llegada, control; es muy bueno tácticamente... Y tiene algo curioso: siempre empieza apagado y acaba comiéndose el campo".
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