El pacto salarial aparca las cláusulas que garantizan el poder adquisitivo
La revisión de sueldos dependerá del IPC español, el europeo y el petróleo
Salir de la crisis va a costar sacrificios a todos. Por lo que toca a los empleados que aún conservan sus puestos de trabajo, el sacrificio consiste en menores salarios reales y perder poder adquisitivo. Es decir, empobrecerse. El pacto de moderación salarial que UGT, CC OO, CEOE y Cepyme alcanzaron definitivamente ayer recoge una subida salarial de hasta un 0,5% este año, y subidas de hasta un 0,6% en 2013 y 2014. Además, el acuerdo recomienda a los negociadores de convenios unas nuevas cláusulas de compensación para los asalariados cuando los precios se disparen, que distan mucho de garantizar el poder adquisitivo.
El objetivo último del pacto es controlar los precios y lograr que crezcan por debajo de la inflación. Así se matan dos pájaros de un tiro: la pérdida de poder adquisitivo no es tan sangrante para los trabajadores y las empresas españolas ganan competitividad en el exterior. Si la regla se cumple, esto último tendría que propiciar que las exportaciones ganen cuota de mercado y tiren de la economía y el empleo.
Sindicatos y patronal piden un esfuerzo conjunto para salir de la crisis
Conseguir este fin pasa porque "todas las rentas", dice la redacción del pacto, realicen "un esfuerzo conjunto". Traducción: los asalariados pierden poder adquisitivo y los empresarios reciben menos dividendos, ya que se comprometen a reinvertir beneficios.
Para que la bajada real de los salarios no se convierta en excesivo, sindicatos y empresarios han previsto una compleja cláusula de revisión para este año y el próximo si los precios se disparan -lo que ya sería un fracaso del pacto, apuntan en CC OO- . La cláusula se activaría cuando el IPC de diciembre suba más del 2% que fija el Banco Central Europeo (BCE) como objetivo máximo de inflación. Es decir, si en 2012, los precios suben más de lo que espera el BCE, los trabajadores perderán un punto y medio porcentual de su poder adquisitivo.
En principio, la referencia utilizada será la del índice de precios al consumo español, pero si este supera el IPC armonizado de la zona euro, la referencia pasaría a ser este último indicador. Es decir, siempre se tomaría en cuenta el menor de los indicadores.
La fórmula se complica aun más porque los agentes sociales han introducido también en el cálculo la volátil cotización del petróleo. Para ello, han pactado que si los precios suben más del 2% y el petróleo lo hace en más de un 10% en el año, habrá que restar al índice de referencia que se aplique la ponderación de los carburantes y los combustibles. Se trata de una garantía para contener la subida salarial.
Si pese a todas estas salvaguardas, al final la cláusula de actualización entra en vigor, el asalariado solo recibirá una compensación -en una sola paga- por lo que exceda del 2%. Dependerá de cada convenio, que esta paga se consolide en las tablas salariales del año siguiente o no. Esta complicada fórmula se aplicará este año y el que viene. Y, explican los sindicatos, que responde a una situación extraordinaria y "crítica de la economía española".
En 2014 cambian los criterios. Para ese año, el pacto prevé una subida del 0,6% si el estancamiento económico persiste en 2013. Ahora, si la situación mejora y el PIB español crece entre un 1% y un 2%, los salarios subirán hasta un 1%; y si supera el 2%, el incremento pactado es del 1,5%.
A pesar de que la parte salarial del pacto es la más llamativa y sustancial, en esta ocasión el Acuerdo Estatal de Negociación Colectiva, su nombre oficial, tiene un contenido mucho mayor que en otras ediciones. Esta vez incluye avances importantes a la hora de fijar normas para los descuelgues salariales y los condiciones laborales sustanciales (horarios, jornadas, funciones en los puestos de trabajo) y estructura de los convenios. Con este contenido, los agentes sociales, sobre todo los sindicatos, esperan aplacar el ímpetu del Gobierno a la hora de diseñar la reforma laboral que ya ha anunciado Mariano Rajoy para el primer trimestre del año.
Para promover medidas de flexibilidad y potenciarlas como alternativa a los despidos, ahora que España se adentra en una nueva recesión, los sindicatos y la patronal han pactado recomendar que los convenios aumenten del 5% al 10% las horas anuales que los empresarios puedan modificar unilateralmente o impulsar la movilidad interna en las propias compañías.
El texto, que previsiblemente firmarán antes de que acabe la semana Cándido Méndez (UGT), Ignacio Fernández Toxo (CC OO), Juan Rosell (CEOE) y Jesús Terciado (Cepyme), también aconseja que los convenios fijen criterios claros y definidos que faciliten a las empresas no cumplir con las condiciones pactadas en los convenios si se deteriora la situación económica. Así el documento pide que los negociadores tomen parámetros como "la disminución de resultados, de ventas o de productividad en los últimos 12 meses". Pese a esto el patrono no podrá decidir de forma unilateral descolgarse del convenio, seguirá siendo el "acuerdo entre la empresa y los representantes de los trabajadores [...] o los sindicatos más representados".
Los principales puntos del acuerdo
- Subida salarial. En 2012 se aconseja un crecimiento de hasta un 0,5%. En 2013 y 2014, la subida máxima recomendada es del 0,6%. En 2014, el aumento será del 1% si el año anterior la economía española crece entre el 1% y el 2%. Si el PIB supera este último porcentaje, el incremento podrá llegar al 1,5%.
- Cláusula de actualización en 2012 y 2013. Se activará si los precios en diciembre suben más del 2% en todo el año y solo compensará a los trabajadores por la desviación de precios que exceda de este porcentaje. El índice de referencia a tomar será el IPC español. Aunque si el IPC armonizado de la zona euro es menor se optará por este último. Además, habrá que tener en cuenta la evolución de los precios del petróleo. Si la cotización del crudo sube más del 10%, entonces se descontará del IPC de referencia la ponderación de los combustibles y los carburantes.
- Estructura de convenios. Se pide no reformar la negociación colectiva e impulsar los convenios de empresa. También se aconseja "preservar el ámbito provincial", muy criticado desde tribunas académicas y políticas.
- Descuelgue salarial y de condiciones laborales. Se recomienda que los convenios incluyan parámetros objetivos (facturación, resultados) que los faciliten. La decisión tendrá que pactarse entre empresarios y comités de empresa o sindicatos.
- Flexibilidad interna. El pacto reclama que los convenios eleven del 5% al 10% el umbral mínimo de horas de distribución irregular de la jornada anual.
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