"La energía nuclear es imprescindible"
María Teresa Costa Campí (Madrid, 1951), preside la Comisión Nacional de la Energía (CNE) desde junio de 2005. Catedrática de Economía Aplicada, fue elegida para presidir el órgano regulador del sector energético a instancias del PSC, partido por el que fue diputada, aunque no militante. Desde la presidencia del organismo ha visto cómo más de la mitad del sector eléctrico ha pasado a manos de compañías extranjeras. Costa, que aboga por ajustar los precios de la electricidad a los costes reales de la energía, sólo muestra cierta incomodidad ante las críticas que apuntan a una pérdida de peso de la CNE por la falta de relación con el ministro de Industria, Miguel Sebastián.
Pregunta. La teoría dice que liberalización es igual a competencia y bajada de precios. Sin embargo, culmina la liberalización eléctrica y la luz sube otro 2%. ¿Cómo se explica?
"Hay desconfianza y un déficit de información entre los usuarios"
"Con el Ministerio de Industria hay una relación normal y fluida"
Respuesta. No es una contradicción. Los consumidores sujetos a tarifa han pagado precios por debajo de costes. Si la suma del coste de la energía y de los costes de acceso está por debajo de la tarifa, como ha ocurrido desde 2002, se crea una situación de déficit creciente.
P. Es decir, que los precios van a seguir subiendo...
R. Si cumplimos con el Real Decreto de la Tarifa de Último Recurso, los costes han de ser aditivos, es decir, la tarifa ha de recoger todos los costes y, así, esa insuficiencia de ingresos tiene que finalizar.
P. Entonces ¿cuánto deberían subir más las tarifas?
R. Dependerá de la naturaleza de la decisión y de los costes de la energía y de acceso. Lo cierto es que el Real Decreto Ley 6-2009 fija un déficit para 2009 de 3.500 millones, y por lo tanto ése es el margen en el que puede incurrir el sistema. La TUR debe cubrir a clientes vulnerables, pero no competir en precio. Éste, en el mercado libre, debiera estar por debajo de la TUR. Si no, volveremos a un panorama similar al actual.
P. ¿En qué plazo los usuarios deberían notar la mayor competencia en el sector eléctrico?
R. Hay que esperar para ver las estrategias comercializadoras.
P. ¿Pero, hay suficiente información como para que los clientes demanden ofertas y animen la competencia?
R. Hay un déficit de información. En general, el consumidor español es mucho menos luchador que el anglosajón. Ésta es una realidad que va cambiando poco a poco. Por otro lado, la información no se ha dado de forma sencilla y elemental para que sea comprensible por todos. La carta que han enviado las distribuidoras a sus clientes para que éstos opten por una comercializadora se recibe como una carta más.
P. Entonces, algo no se ha hecho bien...
R. Debiera haberse estudiado por parte de expertos en publicidad cómo llegar al cliente. Otra cosa es si ha habido interés por trasladar esa información. No he visto ni oído anuncio alguno en televisión o radio dirigido a los clientes de las distribuidoras diciéndoles que la situación ha cambiado y que pueden elegir libremente su suministrador.
P. La falta de información va acompañada de desconfianza hacia las empresas, como se demostró con las reclamaciones por el paso a la facturación mensual. ¿En qué han quedado esas denuncias?
R. Las comunidades autónomas han tomado las decisiones que les competen. Algunas empresas han vuelto a realizar los recibos.
P. Pero ¿comparte usted la idea de que hay desconfianza hacia las empresas?
R. Sí, hay un sentimiento de desconfianza.
P. Fundado quizá...
R. El consumidor doméstico no es consciente de que ya no hay monopolios y de que si no está conforme con una empresa se puede pasar a otra.
P. Volviendo al comportamiento de las eléctricas, Competencia, en las últimas semanas, ha aprobado sanciones. Parece que actúa más que la CNE.
R. La CNE, semanalmente, abre expedientes sancionadores. Los criterios jurídicos que se aplican en esta institución son que, hasta que no esté cerrado el expediente y demostrado el incumplimiento de la norma, no se da información pública.
P. ¿Cuántos expedientes sancionadores hay abiertos?
R. Cada semana seis o siete.
P. Las renovables son la gran apuesta del Gobierno, pero se critica su carestía y exceso ¿qué opina usted?
R. El modelo de primas para incentivar las renovables ha tenido un éxito rotundo y es una referencia internacional. No obstante, se ha producido un exceso de megavatios instalados respecto a lo previsto en la energía fotovoltaica. Y esto ha provocado un coste sobrevenido. Vamos a estudiar en qué medida la oferta proveniente de renovables en el mercado diario ayuda a que bajen los precios. A la vez, cabe considerar también una mayor asociación entre la posición competitiva de algunas tecnologías y la progresiva desaparición de las primas. Estoy pensando en la tecnología eólica.
P. Y sobre el futuro de las centrales nucleares, ahora en pleno debate, ¿qué opina?
R. En mi opinión, hoy no es concebible que España pueda prescindir del 9% de la potencia y del 20% de la energía, porque la nuclear permite hacer una oferta firme que garantiza el suministro. Además, favorece que se fijen precios más reducidos que con otras tecnologías.
P. Lleva usted cuatro años al frente la CNE, ¿hace balance?
R. Hace cuatro años, nadie pensaba que los mercados pudieran atravesar un proceso de transformación profunda. Se ha producido un trascendental cambio al pasar de un mercado doméstico a uno globalizado.
P. En ese proceso, más de la mitad del sector eléctrico español ha pasado a manos extranjeras. Los más críticos dicen que con la inacción del Gobierno, y la utilización política del organismo que preside.
R. Esto no es así. Con la aplicación estricta de la norma, antes y después del RD 4-2006, lo que teníamos que hacer era autorizar las operaciones. Sentó muy mal que autorizáramos la operación de Gas Natural sobre Endesa, e igualmente la de E.ON, que quiero recordar que fue autorizada con condiciones.
P. Sentó muy mal, ¿a quién?
R. Digamos que al estado de opinión de algunos sectores del país.
P. Pero la CNE tuvo un papel importante en la oposición a la OPA de E.ON sobre Endesa.
R. La CNE no se opuso: como ya le he dicho, la autorizó con condiciones. Otra cosa es que se aprobaran normas en un momento en que había una operación en el mercado. Esto no es responsabilidad de la Comisión. La CNE lo que hizo fue aplicar estrictamente la ley. Esta Comisión nunca ha prohibido una operación de compra durante mi mandato.
P. Para complejas, las relaciones de la Comisión con el ministro de Industria, Miguel Sebastián, que no ha pisado la sede la CNE
R. No recuerdo reuniones del pleno del Consejo con ninguno de los ministros que han ocupado la cartera.
P. Quizá la idea de que la relación con Sebastián no es fluida se debe a que la mitad del Consejo de la CNE ha agotado su mandato hace un año... y no se renueva. Así, ¿se puede trabajar?
R. Eso no tiene nada que ver con que haya buena relación con el ministerio. Tanto con el ministro como con el secretario de Estado de Energía hay una relación normal y muy fluida.
P. A usted se la acusa directamente de permitir la pérdida de influencia y prestigio de la Comisión.
R. No lo comparto. El criterio sobre la institución habrá que buscarlo entre aquellos que conocen los documentos que se aprueban aquí. Esta es una institución que tiene un nivel de calidad elevadísimo en sus trabajos. Hablar es gratis. Calumniar es gratis. La CNE es una institución que elabora documentos muy técnicos que requieren de un alto nivel de formación en materia energética, jurídica y económica. Si no se tiene ese nivel de formación, no se tiene la capacidad para entender completamente los informes, y entonces es muy fácil quedarse con un latiguillo interesado que pueda llevar a equívocos.
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