El comprador, único beneficiado del frenazo del ladrillo
Los constructores hablan abiertamente de crisis mientras las inmobiliarias optan por el estancamiento y auguran la desaparición de 400.000 empleos
Suma y sigue en el frenazo del ladrillo. Si ayer fueron los registradores de la propiedad quienes aseguraban que la compraventa de viviendas ha caído un 20% en el tercer trimestre del año, hoy han sido los constructores quienes han lanzado una nueva señal de alarma sobre el futuro de un sector que ha tirado de la economía española durante la última década. Así, mientras en diciembre de 2006 Euroconstruct -un grupo de análisis formado por 19 institutos europeos- auguraba un crecimiento de la construcción residencial en torno al 5,8%, hoy ya no habla de avance ni de aterrizaje suave, sino de abierto retroceso con una caída de un 3%, situación esperada para 2008. Este descenso "hace que podamos hablar de crisis en el mercado de producción de vivienda", ha asegurado el director del Instituto de Tecnología de la Construcción de Cataluña (ITEC), Josep Maria Checa, en la presentación de un informe de la patronal con las previsiones para los dos próximos ejercicios. No obstante, el sombrío panorama que refleja el informe tiene un principal beneficiado: "Por primera vez en muchos años el tiempo juega a favor del comprador", asegura.
Sobre las previsiones de Euroconstruct de los dos próximos años, la actividad constructora en España bajará un 0,8% en 2008 y un 1,8% en 2009 por la caída del sector residencial, que tendrá un descenso de la actividad en la promoción de entre el 8% y el 10% en ambos ejercicios. Una reducción que, según Checa, "hace que podamos hablar de crisis en el mercado de producción de vivienda".
"La situación tenderá a una nueva normalidad, a mantener un ritmo de 500.000 viviendas anuales en España y adecuarse al entorno, no a las 700.000 a las que estábamos habituados", ha opinado Checa. En 2008, ha añadido, el volumen de actividad del sector se reducirá a 210.000 millones de euros.
"La crisis del residencial es general en toda Europa, pero en España es más acusada, y en este subsector ya no se puede hablar del aterrizaje suave que preveíamos hace seis meses", ha señalado por su parte Josep R. Fontana, director de perspectiva del ITEC.
Fontana ha detallado que "2007 no ha sido un año de transición y que entramos directamente en este año con una caída del 3% en el residencial, el porcentaje que se había previsto para 2008".
La vivienda nueva también bajará en Europa, un 3,2% en 2008, pero en España caerá mucho más y afectará a todo el sector, mientras que en Europa la construcción seguirá subiendo, con aumento de un 1,4% para 2008 y un 1,6% para 2009.
"Más deprisa de lo esperado"
El informe presentado hoy señala que "la desaceleración del sector residencial español se está materializando más deprisa de lo que se preveía, y solamente las grandes inercias generadas por un año 2006 récord están suavizando el aterrizaje en el 2007".
"La demanda se ha enfriado considerablemente: los inversores ya no le ven atractivo a corto plazo y los compradores en busca de una vivienda propia están posponiendo sus decisiones, conscientes de que por primera vez en muchos años el tiempo juega a su favor", considera el estudio.
El cambio de ritmo no ha tardado en notarse en las cifras de visados, que adelantan una caída del 8% en términos de volumen de producción para 2008, 150.000 visados menos que harían retornar al sector a los niveles de actividad de 2004.
El informe prevé para 2009 que aumenten los argumentos de prolongación del reajuste (mucho ''stock'' por colocar, poca predisposición financiera) que los que abogan por una reactivación de la demanda (bajada de precios), por lo que se prevé de nuevo números rojos (-10%).
A la busca de una velocidad de crucero
"El mercado español continúa a la búsqueda de su auténtica velocidad de crucero, es decir, aquel nivel de producción que sea capaz de satisfacer una demanda que ya sólo sería sostenida por razones básicamente demográficas", señala el estudio.
No obstante, hay subsectores mejor situados que el residencial, como la ingeniería civil (en 2008 y en 2009 puede crecer un 4,5% anual como promedio), al tiempo que la edificación no residencial se mantiene (aquí el crecimiento promedio sería 1,6%).
Sin embargo, el informe sostiene que "es indudable que ambos subsectores padecen un desgaste, puesto que hay mercados en donde los vínculos con el residencial son muy directos: menos viviendas significa menos actividad de urbanización y menos presión para la abertura de comercios".
Las inmobiliarias prevén la destrucción de 400.000 empleos
Parece que no se ponen de acuerdo y mientras las constructoras hablan abiertamente de crisis, las inmobiliarias optan por el término estancamiento. Para el G-14, grupo que aglutina a las inmobiliarias más grandes del país, el precio de la vivienda en España se mantendrá estable en términos nominales en 2008, lo que implica descensos en términos reales si le descontamos la inflación, aunque prevén la destrucción de 400.000 empleos en el sector.
Esta previsión se basa en los análisis encargados por el grupo a Analistas Financieros Internacionales que estiman para el próximo año un inicio de viviendas en el entorno de las 490.000 frente a las casi 600.000 del año pasado.
El presidente del grupo, Pedro Pérez, ha afirmado que el ajuste en la construcción de viviendas estaba dentro de sus previsiones, que auguran necesidades de 450.000 casas anuales para los próximos nueve años.
No obstante, Pérez ha señalado que la situación del mercado es de ralentización de inicio y venta de viviendas, pero que no se trata de una crisis.
En este sentido, el G-14 ha constatado que la venta de pisos cayó más del 30% desde agosto, lo que supone más que duplicar la tasa de descenso de entre el 13% y el 15% se registró en la primera mitad del año tras la "agudización" del ajuste gradual que venía registrando el sector por el "significativo impacto" de la crisis de las hipotecas basura (subprime) y la consiguiente reducción de la financiación bancaria tanto a promotores como a particulares.
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