El 'calcio' se oxida

A Italia le salen canas y pierde fuerza. "Hace tiempo te gastabas dinero de verdad y ahora sólo compras a coste cero"; "antes era un equipo de ensueño y ahora eres otro de circo". Estas son algunas de las pancartas que se podían leer en el último partido del Milan en San Siro. El estado anímico del resto de los equipos de la Serie A es bastante similar. Al finalizar el curso se retirarán el milanista Maldini (38 años), el interista Figo (36) y el juventino Nedved (36). Toca un cambio de guardia, un impulso generacional que reactive a los equipos italianos, todos eliminados de la Copa de Europa en los octavos de final. Desde 2002 no se daban unos cuartos de final sin italianos. En la UEFA sólo resiste el Udinese. Lo contrario a la Premier, que mantiene a sus cuatro exponentes en Champions.

"El dinero no sobra, necesitamos soluciones imaginativas", dice el director del Roma

Hay un síntoma de debilidad que explica el mal momento que atraviesa Italia. "El Milan habría vendido a Kaká si el jugador hubiese querido irse", explica Angello Cascella, abogado del derecho deportivo y de muchos jugadores, como Toldo y Gattuso; "eso antes no hubiera ocurrido". Marco Branca, director deportivo del Inter, lo tiene claro: "La crisis afecta a todos por igual". Así opina Tonino Tempestilli, su homólogo en el Roma, liderado por Totti, de 32 años: "El dinero no sobra y hay que buscar soluciones ingeniosas al problema". Pero no todos son optimistas: "Durante años pagamos unos sueldos desmesurados y ahora lo estamos pagando nosotros", conviene Fabrizio Salvatori, responsable del área deportiva del Bolonia. "Estamos en un momento de bloqueo", intercede Giovanni Sartori, director deportivo del Chievo; "las sociedades pequeñas no podemos comprar sin antes vender y las grandes apenas se gastan dinero".

David Beckham, por ejemplo, se ha pagado tres de los cinco millones de euros que pedían los Galaxy para terminar la temporada en el Milan y no restar así sus opciones de ir convocado con la selección inglesa. "El problema acaba de comenzar. No soy nada optimista porque la crisis del fútbol no es del país, sino global", abunda Ariedo Braida, director deportivo del club milanista.

Los equipos italianos no funcionan. Sólo así se entiende que en la última década no hayan alcanzado los cuartos de final en tres ocasiones: en la presente temporada y en los cursos 2000-01 y 2001-02. En el último decenio, además, los equipos italianos sólo se han clasificado un total de 15 veces para los cuartos de final, otras seis para las semifinales, cuatro más para la final y han obtenido dos victorias (el Milan ambas). Empequeñecen ante los resultados de España, que ha tenido 19 cuartofinalistas, 12 semifinalistas, cinco finalistas y tres ganadores (dos el Madrid y una el Barça). Y palidece frente a los ingleses, que han tenido 21, 13, seis y tres sucesivamente. En Italia, sin embargo, no varían las figuras de los equipos punteros desde hace muchos años.

Hay un dato tan expresivo como aclaratorio. Si se contabilizan a los jugadores nacidos antes de 1976, la Serie A cuenta con 58 jugadores de 33 o más años -Fontana, portero del Palermo, se lleva la palma con 42 años-. O, lo que es lo mismo, salen a tres futbolistas por equipo. Poco que ver con el resto de las grandes Ligas europeas. En España hay 44 (2,2 por equipo). En Francia, 39 (1,95). En Inglaterra (1,85), 37; y en Alemania, 36 (2). "Hay que dar confianza a los jóvenes", apunta Tempestilli con determinación. "El fútbol es global y hay muchos comunitarios. Debería haber un cambio generacional", apunta Roberto Bettega, asistente deportivo del Juventus. "Es probable que los jugadores ancianos sean más bravos los que los jóvenes, pero para que un futbolista llegue a los 33 años con un nivel alto, debe haber tenido una vida perfecta. Y eso es complicado", replica Salvatori, no sin antes constatar que el pichichi de la Serie A es Di Vaio, de 32 años. "En Italia se mira mucho el resultado deportivo y no descender a la Serie B; eso es un desastre económico", subraya Sartori. "Tendremos un cambio generacional", concluye Braida, y saca cuentas con Pato (Milan), Giovinco (Juventus), Santon y Balotelli (Inter), Motta (Roma), Montolivio (Fiorentina)...