Gavazzi, el más listo de la fuga

Juan José Cobo ha tachado otro día más en su calendario. Solo tiene que aguantar otras tres jornadas y habrá ganado la Vuelta. En la etapa de hoy, entre Solares y Noja, tenía que cuidar mucho los sprints intermedios, cuyas bonificaciones son una de las esperanzas a las que se agarra Christopher Froome, el rival al que aventaja en solo 13 segundos en la general, para alcanzar el maillot rojo. Una escapada numerosa y el control total que su equipo, el Geox, ha tenido sobre la carrera han permitido a Cobo pasar una jornada tranquila, que ha terminado sin el más mínimo cambio en la general entre los dos aspirantes a llevarse la ronda. La victoria de la etapa ha sido para el italiano Francesco Gavazzi (Lampre), que, junto a Kristof Vandewalle, atacó en el último kilómetro a sus compañeros de fuga, justos de fuerzas, y después se impuso al sprint a su rival.

La carrera se le puso a favor a Cobo bien pronto. Un grupo formado por una veintena de corredores se escapó en el kilómetro 10. Música celestial para el Geox, que se puso enseguida al mando del pelotón y les dejó irse sin reparos. Así se aseguraban de que Froome no pudiera arañar segundos en los sprints intermedios. El equipo de Cobo solo tenía que cuidar de que la distancia con el grupo de cabeza no se les fuera de las manos, dado que en él iban hombres como Purito Rodríguez o Robert Kiserlovski, que se han quedado a 10 y 11 minutos, respectivamente, del líder en la general. El Geox mantuvo al pelotón durante buena parte de la etapa a unos diez minutos a los fugados, una distancia suficiente para no meterse en problemas.

Con este panorama por detrás, los escapados vieron enseguida que se jugarían la victoria entre ellos y comenzaron a atacarse en el Puerto de Alisas, de primera categoría, donde el grupo se partió por la mitad. Todos vigilaban a Purito, el favorito para llevarse la etapa, y se movían en cuanto pestañeaba el catalán. Fue, sin embargo, Paulinho el que lanzó el ataque definitivo a 28 kilómetros del final. Nadie reaccionó al cambio de ritmo y el portugués siguió pedaleando hasta que le cazaron cuando ya acariciaba la victoria, a solo tres kilómetros del final. Justo entonces arrancaron Kristof Vandewalle y Francesco Gavazzi, que tras coger la rueda a su rival le superó en el sprint final. Entretanto, en el pelotón saltaban Roche y Poels, a cinco y diez minutos de Cobo en la general. El Geox, sin embargo, no estaba dispuesto a incrementar el ritmo ni por esas y tuvo que ser el Euskaltel quien aumentase la marcha en el gran grupo para cazar a los dos fugados, disminuir la diferencia con la cabeza de carrera y mantener, así, la décima plaza de Mikel Nieve en la general.

Mañana llega una de las etapas señaladas por los ciclistas para desatar una de las últimas batallas de esta Vuelta, con final en Bilbao y el puerto del Alto de Vivero, de segunda categoría, a 14 kilómetros de la meta. "Es el día más peligroso, porque hay un puerto cerca del final y Froome podría intentar hacer daño ahí", advirtió Cobo en Peña Cabarga. En trece segundos se juega la Vuelta.