Griñán proclama que tiene una moral "fantástica" y confía en la remontada

Piensa el presidente andaluz, José Antonio Griñán, que si el entrenador no insufla ánimo a sus jugadores estos difícilmente podrán creer en la victoria. Y eso es lo que hizo ayer en Jaén, un día después de que todos los sondeos vaticinaran una histórica derrota electoral del PSOE en Andalucía el 20-N. Dijo Griñán que tiene una moral "fantástica" y que está convencido de dar un "vuelco electoral a las encuestas".

Pero, tras la ración de optimismo que marcaba el guión, el secretario general de los socialistas andaluces lanzó un mensaje que sonó a justificación si se consuma la debacle electoral. Para Griñán, el momento actual que vive un partido con tantos años hay que verlo como "un hito más en el camino" que hay que recorrer. "Pero no como lo más trascendental de nuestra historia", añadió. El dirigente socialista restaba así valor al sombrío panorama que dibujan las encuestas y, de paso, ponía el foco en otras metas: "Nuestros problemas son los problemas de los ciudadanos que hay que solucionar".

Griñán debutó ayer en la campaña electoral en la provincia de Jaén con tres actos: una reunión en la capital con empresarios, un encuentro sobre Igualdad en Martos y un mitin por la noche en Andújar. En el primero de ellos, donde no había agricultores, anunció que el PSOE está buscando alianzas en distintos países "para tirar a la papelera" la propuesta que ha hecho la Comisión Europea sobre la Política Agraria Común (PAC), cuyo planteamiento dijo que no se comparte desde Andalucía.

De igual forma hizo una defensa del eje central ferroviario para el transporte de mercancías. "A la derecha se le llena la boca hablando del eje litoral del Mediterráneo, pero se le olvida siempre decir que hay un eje central fundamental para mantener la población en el territorio, para impedir el éxodo del interior al litoral y para hacer que la economía andaluza esté bien diversificada y bien distribuida en el territorio", señaló.

El PP ha introducido el agua entre los ingredientes de su receta para fomentar el empleo en el país. "El agua que sobra puede usarse para crear puestos de trabajo", dijo ayer en Huércal-Overa (Almería) el presidente del PP andaluz, Javier Arenas, en el encuentro que mantuvo con los regantes de esa comarca.

"No hay industria, servicios ni agricultura sin agua", señaló y reiteró que hablar de agua "es hablar de empleo". Por este motivo, y como ya hizo en la campaña del 22-M, prometió que la llegada del PP al Gobierno supondrá la reactivación del Plan Hidrológico Nacional, al que calificó como el proyecto "más solidario de los últimos 30 años" para que el agua que sobra de la España húmeda "no se tire al mar, sino que venga a la España seca", como es el caso de Almería.

El agua, dijo, "no solo sirve para beber, sino también para comer" y estableció una conexión directa entre el agua, el empleo y la economía.

El popular recordó el compromiso de Mariano Rajoy con el trasvase del Ebro y él mismo se ofreció a estudiar una colaboración económica con el trasvase del Negratín si en marzo su partido se hiciera con la Junta.

Por otra parte, el coordinador andaluz de IU, Diego Valderas, llamó "caradura" al expresidente del Gobierno Felipe González, en respuesta al recuerdo que tuvo el socialista este fin de semana de la pinza que IU hizo con el PP en los años noventa. "¿Cómo puede decir eso quien privatizó y está al servicio de Gas Natural y en su consejo de administración?", se preguntó el izquierdista, quien restó a González cualquier credibilidad.