Asesinado en Mexicali el líder pesquero Sunshine Rodríguez Peña tras recibir 40 disparos
El expresidente de la Federación de Pescadores Ribereños del municipio de San Felipe pasó dos años en la cárcel tras ser acusado y luego absuelto de delitos contra el medio ambiente por la pesca ilegal de totoaba


El líder pesquero en Mexicali, Sunshine Antonio Rodríguez Peña, ha sido asesinado este sábado en la capital de Baja California en plena luz del día mientras vendía pescado. Rodríguez había hecho una transmisión en vivo en sus redes sociales unos minutos antes de que fuera atacado por cuatro hombres que llegaron en un coche al lugar donde el hombre ofrecía sus productos, en una avenida de la colonia Independencia, muy cerca del centro de la ciudad fronteriza. La Fiscalía informó que Rodríguez recibió al menos 40 disparos y que se trató de un ataque directo y “atípico” en una zona en la que la violencia se ha agravado en las últimas semanas. Rodríguez había pasado dos años en la cárcel desde 2020, cuando se le acusó de ser un presunto integrante del cartel del Mar, y por presuntamente estar ligado a la pesca ilegal de la totoaba, una especie en peligro de extinción protegida en México cuya vejiga es altamente cotizada en el mercado chino por sus supuestas propiedades curativas y afrodisiacas y por la que se pagan hasta 60.000 dólares en ese país.
María Elena Andrade, la fiscal de Baja California, dijo que la agresión fue planeada y que no hay indicios de que el asesinato se relacione con la pesca. Sin embargo, unas horas más tarde, en otro ataque con arma de fuego en el municipio de San Felipe —a unos 200 kilómetros al sur de Mexicali— fueron asesinados dos hombres, entre los que estaba Gastón Eduardo Parra Aispuro, hermano de Óscar alias El Parra, vinculado presuntamente al cartel del Mar y quien era amigo cercano de Sunshine Ramírez. La Fiscal Andrade dejó abierta la posibilidad de que estos dos ataques estén relacionados. “No se descarta que pudieran estar vinculados, tanto el ahora fallecido como Parra Aispuro tenían una relación cercana”, dijo.
Sunshine Ramírez acostumbraba llevar la mercancía de pescadores de San Felipe para venderla en la capital, Mexicali. Era un personaje polémico, involucrado en la defensa del trabajo de los pescadores de ese puerto que suelen trabajar en las aguas del Mar de Cortés y que en reiteradas veces se manifestó en contra de ambientalistas a quienes acusó de obstaculizar el desarrollo económico de su comunidad al apoyar por ejemplo, un boicot al camarón mexicano.

En 2017 Ramírez encabezó la protesta en contra de activistas de Sea Shepard, convocando a cientos de pescadores para manifestarse en contra de la presencia de dos embarcaciones de la organización que trabaja desde hace años con el Gobierno mexicano para frenar la pesca ilegal, ante el peligro de extinción de especies como la totoaba o la vaquita marina. “No podemos pescar urbina, chano, sierra, camarón, tiburón, manta... Que nos voltee a ver el mundo, de que estamos hartos”, se le escucha decir en esa protesta a Ramírez, a medios de comunicación.
En ese mismo año, según reportan medios locales, Sunshine Ramírez tuvo uno de sus primeros encuentros con la justicia, cuando en un operativo carretero fue detenido junto con su esposa por presunta posesión de droga, un cargo del que días después fue absuelto.
Lo mismo llamaba a manifestarse por la falta de trabajo de los pescadores, que convocaba a cerrar gasolinerías en el Estado por los altos precios del combustible en su municipio, como denunciaba a través de sus videos los retenes militares en la carretera y los presuntos abusos que cometían autoridades locales. También se lanzaba en contra de periodistas y de ambientalistas, amenazando con golpearlos si se los encontraba, y participaba en entrega de útiles o alimentos a las familias de pescadores.
En noviembre de 2020, la Fiscalía General de la República (FGR) acusó a Ramírez de delincuencia organizada con fines de cometer delitos contra el ambiente y lo señaló como uno de los presuntos líderes del cartel del Mar, una organización internacional que pesca y trafica ilegalmente la totoaba. Dos años después, un juez federal en Hermosillo, Sonora —donde había permanecido preso— consideró que no había suficiente evidencia sólida por parte del Ministerio Público para mantener tras las rejas a Sunshine, y lo absolvió. En marzo de 2023, Rodríguez denunció una persecución política en su contra, durante los ocho años previos.
En octubre de 2023, en una publicación de sus redes sociales, Sunshine Ramírez mostró un video en el que presenta un proyecto que lideró en plena pandemia por coronavirus para apoyar a las familias afectadas por el parón económico. “Hace tres años intentamos hacer un proyecto para todo un estado para llegar a todas las personas que no tienen una oportunidad de que les llegara pescado fresco a la proteína que dice la FAO que debe comer para una buena salud. Pero alguien muy poderoso se molestó y la truncaron hoy más lejos que nunca, pero algún día lo volveremos a intentar”, escribió.
Sunshine Ramírez, considerado por muchos habitantes de San Felipe y de varias comunidades en Baja California como un líder social al que acudían a pedir ayuda y apoyo, llegó a insinuar en algunas entrevistas que la vaquita marina no existe, y que se trataba de una estrategia para frenar la pesca que da fuentes de trabajo a miles de familias. También llegó a asegurar que “los verdaderos criminales” en la reserva del alto Golfo de California eran en realidad los integrantes de la organización Sea Shepard.
El asesinato de Ramírez se suma al de Minerva Pérez Castro, presidenta de Cámara Nacional de la Industria Pesquera y Acuícola (Canainpesca) en de julio del 2024, en Ensenada, Baja California; y el del empresario pesquero también de Ensenada, Servando Valenzuela Nakato, en diciembre del 2024.
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