Jessica Marjane, activista trans: “Impedirnos la entrada a baños públicos es reforzar el estereotipo de que somos hombres vestidos de mujer”
La Suprema Corte de México reconoce en una sentencia histórica que impedir el acceso al baño a una persona trans es discriminación e implica una presunción de daño moral que debe ser indemnizado


El 25 de noviembre de 2015, después de participar en una marcha en contra de la violencia que viven las mujeres, Jessica Marjane y Alessa Flores intentaron entrar a uno de los baños del centro comercial Reforma 222, ubicado en la concurrida avenida Paseo de la Reforma donde generalmente se llevan a cabo las grandes manifestaciones en Ciudad de México. Ahí, elementos de seguridad las interceptaron y les negaron el acceso al sanitario por ser mujeres trans. Casi 10 años después, una justicia tardía ha llegado para ellas. La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ordenó a la compañía indemnizarlas por daño moral, una sentencia histórica que Alessa no alcanzó a celebrar porque fue asesinada en un crimen de odio en 2016.
“La decisión de la Corte acredita que hubo discriminación, que la discriminación causa daño moral y que el daño moral se debe de reparar. Aunque aún falta que la demanda sea ejecutada por el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México, es un principio para la justicia y reparación trans. También es un mensaje desde México al mundo de que ni las políticas antiderechos ni las violencias lograrán borrar las estrategias de supervivencia de las personas trans”, cuenta la defensora de derechos humanos y asesora jurídica en Juventudes Trans, Jessica Marjane. La resolución de la SCJN no solo representa una reparación para Jessica y la memoria de Alessa, sino que sienta un precedente en medio del auge de discursos y políticas de ultraderecha en la región, de Donald Trump hasta Javier Milei. El mandatario estadounidense ha emitido una serie de decretos y órdenes ejecutivas en contra de las poblaciones trans, como el reconocimiento único de lo masculino y femenino como realidades biológicas absolutas y el veto a las mujeres trans del deporte femenino. En Argentina, el presidente ha asegurado que “en sus versiones más extremas, la ideología de género constituye lisa y llanamente abuso infantil; son pedófilos”, dichos por los que ha sido ampliamente cuestionado.
El enmarañado camino hacia la justicia
La sentencia de la Corte es histórica no solo porque es la primera de su tipo, sino que “reconoce que la discriminación por identidad y expresión de género implica una presunción de daño moral, sin necesidad de que las víctimas lo prueben con mayores exigencias”, de acuerdo con un comunicado de la organización Equis Justicias para las mujeres. Esto significa que empresas y particulares que cometan actos de discriminación en contra de personas trans tendrán que pagar la reparación del daño. Pero es una victoria agridulce: en México el 51% de las personas trans y no binarias ha vivido experiencias discriminatorias al tratar de ingresar al baño acorde a su identidad de género, de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Discriminación por motivos de Orientación Sexual e Identidad de Género (ENDOSIG, 2018) realizada por el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (CONAPRED). Para Marjane entrar al baño de mujeres aún representa miedo. Sin embargo, ahora se ha abierto una puerta para reclamar justicia.
El proceso judicial iniciado por Jessica y Alessa contra la administración de Reforma 222 ha sido un camino de espera, obstáculos y revictimización. Luego de que en la plaza comercial no recibieran su queja, acudieron al Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación en la Ciudad de México (COPRED), que determinó que sí hubo un acto discriminatorio; sin embargo, la empresa se negó a reconocer su responsabilidad e incluso aseguraron que actuaron para “proteger a las mujeres cisgénero”, dice Marjane. “Esto es sumamente triste porque refuerza los estereotipos de que las mujeres trans somos hombres vestidos de mujer”, agrega.
Aunque Marjane se convirtió en el rostro de esta lucha y lideró la estrategia de litigio, ella asegura que “no llegamos solas”. Su “revolución” fue apoyada por organizaciones de México y la región, como Promsex (Argentina), Amicus DH (Guajanajuato, México), la COPRED, la Comisión de Derechos Humanos de Ciudad de México (CDHCM), la Red de litigantes LGBT de las Américas y Colombia Diversa. Ella dice que la lucha sigue porque “sabemos que hay casos similares atorados en la Corte que se han inspirado en nuestra estrategia legal”.
Marjane forma parte de la iniciativa Baños para todes, un observatorio que da seguimiento a los casos de discriminación en baños públicos. El objetivo es documentarlas y luego llevarlas a los gobiernos locales y al federal.

Alessa Flores: activista y víctima de transfeminicidio
Alessa Flores fue una activista trans y trabajadora sexual que dedicó su vida a la defensa de los derechos de la comunidad LGBT+ en México. En 2016 fue hallada sin vida en un hotel de la Ciudad de México, en un crimen que se suma a las decenas de transfeminicidios que ocurren anualmente en el país. Según el Observatorio Nacional de Crímenes de Odio contra Personas LGBT, entre 2015 y 2022 se registraron más de 400 asesinatos de personas trans en México, con una tasa alarmante de impunidad.
Aunque la Suprema Corte ha reconocido los derechos de las personas tras a vivir sin discriminación, el caso de Alessa Flores sigue sin resolverse. Su nombre se suma a una larga lista de mujeres trans asesinadas en México, cuyas muertes aún claman justicia.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma
