El Congreso aprueba la reforma que amplía la facultad del presidente para perdonar todo tipo de delitos

El Congreso mexicano ha ampliado las facultades de la figura presidencial. La Cámara de Diputados ha aprobado la reforma a la Ley de Amnistía la noche de este miércoles. La modificación faculta al presidente a conmutar penas y procesos penales en casos “relevantes para el Estado mexicano”, de manera directa y sin importar la gravedad del delito que hayan cometido. El presidente, Andrés Manuel López Obrador, ha adelantado que utilizará estás modificaciones a la ley que él mismo impulsó para resolver casos como la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa en Iguala, Guerrero. Las reformas legales están a la espera de su publicación en el Diario Oficial de la Federación para su entrada en vigor.

Esta reforma a la Ley de Amnistía amplía la facultad de la figura presidencial de liberar o indultar a personas, ahora sin intermediarios. Hasta ahora se establecía la creación de una comisión de amnistía dependiente de la Secretaría de Gobernación, facultada para analizar cada caso, previa solicitud, como requisito para conceder el beneficio.

“Por determinación exclusiva de la persona titular del Poder Ejecutivo se podrá otorgar el beneficio de la amnistía de manera directa, sin sujetarse al procedimiento establecido en este ordenamiento”, establece el nuevo artículo que se le ha adicionado al ordenamiento. Los acreedores al perdón presidencial directo serán aquellas personas que aporten elementos comprobables y útiles para conocer la verdad de los hechos en casos que sean relevantes para el Estado mexicano.

Los legisladores de Morena y aliados han defendido la modificación —la oposición la considera inconstitucional—. Sostienen que el objetivo de esta nueva reforma es garantizar el derecho a la verdad y que la víctimas directas e indirectas puedan conocer los hechos por los que fueron afectadas, como ejemplo, la desaparición de estudiantes en Iguala, Guerrero, como López Obrador adelantó en los días previos a la discusión de la reforma. “Algunos de ustedes seguramente tienen información relevante que gracias al pacto de silencio ocultan a las víctimas. Por eso entendemos que se opongan a la presente reforma. Algunos de ustedes temen ser vinculados”, dijo Jesús Madriz legislador de Morena durante el debate legislativo la noche de este miércoles.

Es la tercera reforma en esta semana que la oposición anuncia que impugnará ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN). Por ser una modificación legal sólo requiere de mayoría simple, es decir, la mitad más uno, Morena y aliados los tienen. Ante la imposibilidad de frenar en el Legislativo la única apuesta de la oposición es la vía de la inconstitucionalidad. “Es inadmisible porque se presta a que el presidente de la república utilice la figura del poder para liberar a sus amigos, a sus compas, a sus socios, a sus cómplices. No importa si son asesinos o narcotraficantes”, lanzó el diputado Enrique Sosa a nombre de la bancada del PAN.

“El problema es que detrás de él vendrán nuevas presidentas y presidentes. Buenos y malos, habrá tiranos. ¿No se dan cuenta de que otorgándole al Ejecutivo esto le están dando todos los elementos que necesita para instaurar una dictadura?”, lanzó el panista. Las descalificaciones, improperios y denuestos entre la mayoría oficialista y la oposición se mantuvieron durante más de cuatro horas de debate. “Mienten cuando dicen que esta reforma es para empoderar al Ejecutivo federal, que es una concentración del poder, que se convertirá en un ser omnímodo y que vulnera las atribuciones del Congreso [...]. No vengan a decir que se van a liberar narcos, secuestradores, violadores y no sé cuántas mentiras más. Es una facultad única y exclusivamente para casos relevantes del Estado mexicano”, dijo Benjamín Robles de la bancada del PT.

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