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El guardia agredido en Puebla: “Todo empezó porque al chico no le abrió la pluma de residentes”

Jonathan Nolasco desmiente en una entrevista con ‘Milenio’ que haya sido despedido de su trabajo tras los puñetazos que Patricio Pereyra le propinó en Lomas de Angelópolis

Jorge Vaquero Simancas
Dos momentos de la agresión a Jonathan Nolasco, guardia de seguridad en Puebla.
Dos momentos de la agresión a Jonathan Nolasco, guardia de seguridad en Puebla.CORTESÍA

Jonathan Nolasco, el guardia de seguridad de 19 años que fue golpeado el pasado lunes en Puebla por el menor Patricio Pereyra, ha declarado que la paliza “empezó porque al chico no le abrió la pluma de residentes”. La víctima ha explicado que los golpes pararon gracias a que una vecina del fraccionamiento de Lomas de Angelópolis comenzó a grabar la agresión. Nolasco ha desmentido en una entrevista con Milenio que fuera despedido, tras la repercusión de noticias falsas sobre su expulsión de la empresa VIMA.

La pluma de entrada no abrió por un problema de la aplicación móvil que los residentes del lujoso fraccionamiento usan para poder acceder al aparcamiento de sus viviendas. Nolasco explica que él no tenía acceso para poder elevar la valla manualmente. Sin embargo, al final se levantó, y mientras el gran Jeep de Pereyra la pasaba, el menor agredió verbalmente al guardia de seguridad: “Me empezó a ofender verbalmente, me dijo que me iba a romper la madre, que iba a regresar”.

Pereyra paró la camioneta a 10 pasos de la caseta y volvió para cambiar las palabras por los puños. “Me empujó y me empezó a agarrar a golpes”, explica Nolasco. El joven ha explicado que sufre “dolores de cabeza” y espera “los resultados finales” de los médicos para saber si sufre alguna fractura en la cara. En una clara situación de poder, Pereyra agredió a Nolasco mientras lo acusaba de haber sido el que inició la pelea. La cámara de seguridad que había en la caseta demostró lo contrario.

Varios medios de comunicación difundieron noticias falsas en las que explicaban que Nolasco había sido despedido de su trabajo. Sin embargo, la empresa de seguridad VIMA lo desmintió horas después. El trabajador, que en una actuación impecable no golpeó ni una vez a Pereyra, lo ha confirmado en la entrevista: “Hasta el momento la empresa me ha apoyado, tengo asistencia médica y me dan movimiento”. El joven, cuando se recupere, comenzará a trabajar en otro residencial.

Nolasco ya ha denunciado Pereyra. “Me han dicho [la autoridad] que se iba a proceder legalmente, pero como es menor de edad [Pereyra] se iban a hacer unos pequeños cambios”, ha anunciado. El agresor fue expulsado temporalmente de la preparatoria de la Universidad Anáhuac el pasado martes, cuando la institución educativa sacó un comunicado condenando su actitud.

Es la segunda vez en tan solo dos meses que alumnos de esta universidad privada de Puebla protagonizan un hecho violento. El pasado sábado 9 de septiembre, un grupo de siete jóvenes, entre los que había estudiantes de la institución, pegaron una paliza a Ernesto Calderón bajo la Estrella de Puebla, también en la zona de Angelópolis. La víctima sufrió una fractura de cráneo y fue hospitalizado durante días. Cinco de los siete agresores siguen sin aparecer.

El gobernador de Puebla, Sergio Salomón, ha condenado lo que considera un acto “clasista” en su cuenta de X, antes Twitter.: “Condeno el clasismo. Condeno la brecha elitista que separa a uno de otros por su condición social, racial, de credo, condición física o preferencias”. De momento, la Fiscalía de Puebla investiga un acto de violencia que se puede saber que solo fue ejercida por una de las partes gracias a las imágenes difundidas en redes sociales.

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