Conjunción de Venus y Júpiter 2023: cómo y cuándo ver el encuentro de planetas desde México

Un mes después del paso del cometa C/2022 E3 por el cielo nocturno, Venus y Júpiter protagonizan una de las conjunciones más espectaculares del año. Durante las tardes del 28 de febrero y 1 de marzo, ambos planetas desfilarán juntos hacia el oeste, hasta ocultarse tras el horizonte un par de horas después de caer la noche.

Tal y como sucede con las constelaciones, creadas a partir del trazo de líneas imaginarias que unen estrellas separadas por decenas o cientos de años luz para formar una silueta que varía según cada cultura, una conjunción es producto de la perspectiva del observador terrestre. Separados por más de 600 millones de kilómetros, Júpiter y Venus mantienen sus respectivas órbitas alrededor del Sol, sin embargo, cada trece meses parecen aproximarse entre sí en la bóveda celeste.

La conjunción entre Júpiter y Venus de 2023 será especialmente visible para los observadores desde el hemisferio norte, donde aparecerán más alto al caer la noche y, por lo tanto, se ocultarán tras el horizonte más tarde. Venus, el planeta más caliente del Sistema solar, un mundo rocoso e inhóspito con una atmósfera amarillenta compuesta principalmente por dióxido de carbono, brillará con mayor intensidad que Júpiter, el gigante gaseoso de nuestro vecindario cósmico que alberga tormentas y vórtices tan grandes como la Tierra.

Cuándo ver la conjunción entre Venus y Júpiter desde México

Aunque ambos mundos parecen acercarse cada vez más desde mediados de febrero, el mejor momento para ver la conjunción será el anochecer del 1 de marzo. Tan pronto como los últimos rayos del Sol lo permitan, el dúo de planetas brillará inconfundible en el oeste. El efecto será más evidente conforme caiga la noche y se prolongará durante un par de horas, antes de que los astros se oculten tras el horizonte. Júpiter y Venus seguirán siendo visibles hasta mediados de marzo, sin embargo, su aparente cercanía desaparecerá gradualmente conforme se aproxima la primavera boreal.

Para una mejor experiencia lo más recomendable es encontrar un sitio libre de contaminación lumínica, lejos de las grandes ciudades. Aunque Júpiter y Venus serán perfectamente visibles a ojo desnudo, utilizar un par de binoculares o un telescopio sencillo permitirá captar más detalles de cada uno, como los cuatro satélites galileanos que acompañan al gigante gaseoso, o las fases de Venus, similares a las lunares para el observador terrestre.

Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS México y reciba todas las claves informativas de la actualidad de este país