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Las incautaciones de fentanilo en EE UU crecen a ritmos sin precedentes

Las autoridades de la frontera han decomisado en lo que va de 2021 más de 3.800 kilos del opioide, casi el doble que el año anterior

Micaela Varela
Un consumidor sujeta una dosis inyectable de heroína mezclada con fentanilo en Pensilvania, Estados Unidos
Un consumidor sujeta una dosis inyectable de heroína mezclada con fentanilo en Pensilvania, Estados Unidos, el pasado 19 de julio.SPENCER PLATT (AFP)

El departamento de Aduanas y Protección Fronteriza de EE UU (CBP por sus siglas en inglés) ha incautado en lo que va de año 3.800 kilos de fentanilo, una cifra que casi equivale al total de la droga decomisada en todo 2020. En paralelo, las autoridades sanitarias de diferentes Estados han advertido del aumento de muertes por sobredosis a causa de este opioide. Solo en Washington, el 46% de las muertes derivadas del consumo excesivo de drogas son a causa del fentanilo, la sustancia que pone en jaque a las estrategias gubernamentales para combatir el narcotráfico y el aumento de muertes a causa de su uso.

La CBP ha detallado en sus estadísticas que desde 2018 la cantidad de fentanilo incautado en las fronteras estadounidenses se ha multiplicado por 6,5. Junio ha sido el tercer mes desde que se tienen registros con más cantidad de esta droga requisada, con más de 450 kilos. Solo le superan diciembre y octubre de 2020, cuando las autoridades registraron 540 y 550 kilos respectivamente. En proporción sigue estando muy por debajo de otras drogas —la marihuana con casi 130.000 kilogramos al año es la droga más incautada en EE UU, seguida de las metanfetaminas y cocaína— pero el aumento en paralelo de sobredosis por esta sustancia eleva la preocupación de las autoridades.

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El Departamento de Salud del Estado de Washington ha informado que de las 418 muertes por sobredosis en los primeros tres meses del año, 191 de ellas corresponden a fentanilo. En su mayoría, las muertes por el uso excesivo de esta sustancia farmacéutica corresponden a personas jóvenes menores de 30 años de minorías étnicas con dificultades para acceder al sistema de salud. En un comunicado han advertido a la población que se mantenga alerta ante el consumo de pastillas azules marcadas con una M. Estas píldoras pueden venderse como un medicamento opioide bajo prescripción, pero su pureza y composición pueden ser engañosas poniendo en peligro la salud de los consumidores, especialmente si las mezclan con otros medicamentos.

El preocupante incremento del uso de esta droga también se ha hecho sentir en México. En el último informe del Departamento Internacional de Fiscalización de Estupefacientes se detalla que en una muestra realizada por el Gobierno mexicano sobre los consumidores de heroína y metanfetamina cristalina en las ciudades de la frontera norte de México, se detectó que 93% de la heroína blanca en polvo, el 40% de la heroína negra y el 100% de speed ball (una combinación de heroína y metanfetamina cristalina) contenían fentanilo.

En un intento por perseguir el tráfico de esta droga, el gobernador de Texas, Greg Abbott, ha presentado un proyecto de ley para endurecer el castigo a todo aquel que fabrique o distribuya fentanilo. “Solo este año, el Departamento de Seguridad Pública de Texas ha incautado suficiente fentanilo para matar a todas las personas en Texas y California juntas”, ha informado el gabinete de Abbot en un comunicado. En total, ha habido un aumento 950% en incautaciones de fentanilo en la frontera sur de Texas en comparación con el año pasado.

El Centro de Control y Prevención de Enfermedades de EE UU ha detallado que en los últimos dos años las muertes a causa de sobredosis se han disparado casi un 46%. Las drogas opioides sintéticas como el fentanilo ocasionan cinco veces más muertes que la heroína y 3,5 veces más que la cocaína. Comenzó a usarse en la década de los 60 como un anestésico intravenoso, ya que es entre 50 y 100 veces más potente que la morfina. La mezcla de analgesia y euforia que proporciona lleva a muchos a utilizarlo como sustituto de la heroína, ya que es considerablemente más barata.

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Sobre la firma

Micaela Varela
Es periodista de EL PAÍS en Ciudad de México. Nacida en Argentina y criada en Valencia, España. Graduada en la carrera de Periodismo en la Universitat Jaume I y máster de Periodismo en EL PAÍS. Trabaja en la mesa digital de América y escribe sobre derechos humanos, sociedad y cultura.

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