Iván Duque ratifica en Buenos Aires su apoyo a la reelección de Mauricio Macri

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Mauricio Macri suma apoyos regionales. Primero fue el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, quien abiertamente pidió el voto por su par argentino durante una demorada visita a Argentina, la semana pasada. Ahora ha sido el turno del colombiano Iván Duque. Durante una gira de poco más de 24 horas a Buenos Aires, Duque dijo que una victoria de Macri en las elecciones generales de octubre será “fundamental para América Latina”. No es común que presidentes de otros países apuesten sin vueltas por un candidato a presidente en otro país. Pero la fórmula que tiene como vicepresidenta a Cristina Fernández de Kirchner lidera las encuestas en Argentina y las alarmas suenan en el bloque de países conservadores de la región.

Es la tercera vez que Macri y Duque se ven cara a cara. La primera fue en Bogotá en agosto pasado, cuando el argentino viajó para para la asunción presidencial. A finales de marzo, ambos presidentes participaron en Chile del lanzamiento de Prosur, el bloque con el que Sudamérica busca reemplazar a la Unasur, herencia de los años en los que gobernaba la izquierda de Hugo Chávez, Lula da Silva y Néstor y Cristina Kirchner. Esta última cita fue para reforzar lazos comerciales y poner negro sobre blanco en las prioridades regionales, esto es un freno al regreso “del populismo” y una mayor integración económica.

Desde que Macri llegó al poder, en diciembre de 2015, Argentina buscó un acercamiento a la Alianza del Pacífico, el bloque económico que Colombia integra junto con Chile, Perú y México. Ambos bloques hicieron además un frente común contra Nicolás Maduro en Venezuela. Duque se refirió al tema durante una reunión que mantuvo con empresarios argentinos interesados en invertir en Colombia. Les dijo que su país será un actor fundamental en la reconstrucción de Venezuela tras una eventual transición. Y puso como evidencia de la resistencia de la economía colombiana la recepción de 1,5 millones de venezolanos emigrados durante los últimos tres años. “Cuando uno ve una economía que es capaz de resistir semejante choque, crecer, y crecer con responsabilidad fiscal, lo que muestra es la resiliencia y la capacidad de adaptación que tiene la economía colombiana”, dijo Duque.

Macri recibió a Duque como un amigo personal. El domingo mantuvo a solas una cena en la residencia presidencial de Olivos y el lunes mantuvo otro encuentro privado en la Casa Rosada. En esas citas a puertas cerradas Macri puede haber escuchado el apoyo electoral que el colombiano le prodigó ante la prensa local. En un cuestionario que contestó por escrito al diario Clarín, Duque dijo que “Macri ha hecho un enorme esfuerzo por reconstruir los daños institucionales y económicos que dejó el populismo”. Luego advirtió a los argentinos que “esa tarea debe ser reconocida y debería tener continuidad”.

Más clara fue su apuesta ante el diario La Nación. Duque dijo que América Latina hoy vive una confrontación entre demagogos y pedagogos. Los primeros “promueven el odio de clase, creen en el estatismo y persiguen el aparato económico”. Los segundos “son los que les hablan a los pueblos con responsabilidad, respetando la iniciativa privada, las libertades, la administración eficaz”. Duque ubicó a Macri entre los pedagogos y lo definió como un líder esforzado en “reorientar la capacidad productiva de la Argentina para que se traduzca en equidad y beneficios, dentro de una economía de mercado”. “Yo pensaría”, dijo, “que la reelección del presidente Macri es algo fundamental para América Latina”.