_
_
_
_
RUBEN LOPEZ | HIJO DE DESAPARECIDO EN DEMOCRACIA

“Etchecolatz es un Hitler en Argentina”

El hijo del albañil Jorge Julio López rechaza el arresto domiciliario para el represor

Ruben López en el taller de su padre Julio, con un retrato de éste.
Ruben López en el taller de su padre Julio, con un retrato de éste.Juanjo Bruzza

Si hay una persona por la que el represor Miguel Etchecolatz está preso, ese es Julio López. El testimonio que brindó el 18 de septiembre de 2006, el tercero que aportó a la causa, acerca del funcionamiento del “llamado circuito Camps” (por Ramón Camps, un general a cargo de los centros de detención ilegal en provincia de Buenos Aires) permitió a la justicia conocer una de las tramas más perversas de la dictadura militar. Julio López ya no está, desapareció tres horas después de aquella declaración. No está preso, ni de viaje, ni detenido, ni en su casa, junto a su esposa Irene y su hijo Rubén, el mismo que hoy siente miedo ante la posibilidad que Etchecolatz continúe su condena en la comodidad de su domicilio y no en una cárcel común.

“Tenemos miedo en el sentido de que estas situaciones no tendrían que pasar por una cuestión lógica: hace 10 años que a mi viejo nadie lo busca y Etchecolatz ya va a quedar libre”, argumenta Rubén en diálogo con EL PAÍS, “No tiene sentido. Uno puede pensar que son unos viejitos buenos, que no van a hacer nada pero están presos por genocidas. Este tiene 5 condenas y va por más”.

Pregunta: ¿A qué más le tiene miedo?

Respuesta: El miedo es que mi viejo haya desaparecido en vano. Necesitamos que estén presos en cárcel común y tampoco comparto que se lo haya hospitalizado extramuros. Este tipo va a salir antes de que lo encuentren a mi viejo.

P: Cuando lo entrevistamos en marzo dijo que le daría tiempo a Mauricio Macri, ¿Lo defraudó?

R: No te puedo decir que Macri me defraudó pero va en camino. Hace poco leí al secretario (de Justicia y Derechos Humanos) Claudio Avruj diciendo que entiende el dolor de la familia pero me parece que no lo entiende porque no está entre nosotros.

P: ¿Qué opina del anuncio de que el gobierno no apelará las detenciones domiciliarias?

R: No me llama la atención el anuncio del gobierno porque así piensa. Hoy están en evidencia las políticas del gobierno en materia de Derechos Humanos. Este siniestro genocida es comparable con Hitler en Alemania. Es la misma comparación y no estamos lejos de eso. Este personaje es un Hitler en Argentina y lo único que falta es que nos digan que es un viejito piola () y no va a hacer nada mientras manejaba todo desde la cárcel como titiritero.

Jorge Julio López es un albañil que hoy tendría 87 años. El 27 de octubre de 1976, mientras gobernaba Argentina la junta militar, fue detenido y confinado a distintos centros de detención en momentos en que el ex represor Miguel Etchecolatz era Director de Investigaciones de la Provincia de Buenos Aires, encargado de uno de los centros de detención clandestinos y mano derecha del ex General Ramón Camps. Fue liberado el 25 de junio de 1979 tras sufrir torturas con picanas y ver como ejecutaban a sus compañeros.

Con el advenimiento de la Democracia en 1983 y los juicios a los militares en la última década, se convirtió en un testigo esencial del Circuito Camps, como se llama al recorrido que hacían los detenidos por las dependencias de la provincia al mando del ex general. López fue uno de los pocos que denunció que los jefes de la Policía Bonaerense se paseaban por los centros clandestinos y participaban de las torturas. También afirmó que Camps torturaba en persona en el Pozo de Arana, junto a su mano derecha, un hombre con “cara de mono” que después identificó como Etchecolatz. En el juicio oral recordó: “Había un tipo que anotaba y Etchecolatz estaba al lado, le decía “dale, dale subila un poco más” (por la picana). En una de las audiencias que contó con la presencia del represor, éste mostró a los medios un papel con el nombre del albañil cuando ya había desaparecido, en plena democracia.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_