La sopa que necesitas cuando estás resfriado
No es milagrosa pero sí muy reconfortante: con verduras, pollo y varias especias conseguimos que sea sabrosa y nutritiva
Los que no han pasado dos resfriados en lo que llevamos de invierno, han pasado cuatro, y los que por ahora se han librado todavía tienen un par de meses para llenar el cupo de la temporada. No vengo con remedios mágicos ni alimentos milagrosos. Ya sabes lo que dicen, un trancazo dura siete días y si vas al médico, seis. Con la alimentación igual: no hay nada que puedas comerte que vaya a hacerlo desaparecer.
Si esos días los pasas comiendo platos calientes y reconfortantes que, al menos, alivien momentáneamente la sensación de tener la cabeza metida en una pecera, pues mejor. La sopa es una gran aliada, especialmente, porque en estas situaciones lo que no puede faltar es agua. Yo la hago con ajo y cebolla, un poco de cúrcuma, ralladura de limón, jengibre y anís estrellado. Le pongo una pechuga de pollo para que se cueza y aporte sabor al caldo, y termino con alguna verdura de hoja verde.
Está claro que no te curas después de tomarla, pero prometo que la sensación de alivio es real y, además, estás metiendo alimentos nutritivos al body. La experiencia mejora mucho si alguien que te quiere mucho es quién la prepara, mientras tú dormitas en el sofá cubierta con cuatro mantas.
Dificultad: Mínima, puede cocinarse incluso estando resfriada
Ingredientes
Para 2 personas
- 1 pechuga de pollo grande
- 3 hojas de kale o acelga
- ½ puerro
- 3 dientes de ajo
- ½ cebolla
- 1 trozo de jengibre de tres centímetros
- 1 anís estrellado
- 1 limón
- ¼ cucharadita de pimienta negra en grano
- ½ cucharadita de cúrcuma
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra
- Zumo de limón
Instrucciones
Picar el puerro y sofreír a fuego fuerte en una olla. Cuando coja color cubrir con agua y añadir media cebolla, los dientes de ajo aplastados, la pechuga de pollo entera y un poco de sal.
Preparar un saquito para las especias -las bolsas para hacer té funcionan genial- y rellenar con el jengibre, el anís, tres trozos de ralladura de limón y la pimienta negra). Añadir al caldo.
Dejar cocer durante 20-30 minutos.
Retirar la bolsita de especias, la cebolla y los dientes de ajo. Desmenuzar la pechuga de pollo y volver a añadir al caldo.
Picar las hojas de kale o acelga y cocer en la sopa durante tres minutos. Terminar con el zumo de medio limón (o al gusto).
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