“Siempre muestro los tobillos; es mi seña de identidad”

Douglas Conklyn, o simplemente 'Doug', entró en Dockers (del grupo Levi´s), la marca más famosa del mundo de pantalones chinos, y la modernizó por completo. Tiñó los pantalones de colores sorprendentes (rosa pastel, amarillo cálido, azul desvaído...), creó nuevos estilos y las calles se llenaron de gente vistiéndolos. Él cuenta que entró en la marca con una idea clara: "Quería infundirle vida". Desde San Francisco, sede de la firma, responde al teléfono derrochando simpat...

Douglas Conklyn, o simplemente 'Doug', entró en Dockers (del grupo Levi´s), la marca más famosa del mundo de pantalones chinos, y la modernizó por completo. Tiñó los pantalones de colores sorprendentes (rosa pastel, amarillo cálido, azul desvaído...), creó nuevos estilos y las calles se llenaron de gente vistiéndolos. Él cuenta que entró en la marca con una idea clara: "Quería infundirle vida". Desde San Francisco, sede de la firma, responde al teléfono derrochando simpatía y mostrando que tiene las ideas muy claras.

Pregunta. En 2010 renovó completamente la oferta de Dockers. ¿Cuál era su intención?

Respuesta. Siempre me han encantado los chinos, desde la adolescencia. Dockers es una de las marcas más importantes del mundo de este tipo de pantalón y yo creía que se podía hacer mucho más, darles más usos. Para mí entrar en la firma me dio la oportunidad de trabajar con los líderes en la industria y aportar mucho a nivel de diseño, herencia, inspiración... Una de mis prioridades era expresar mi amor por los chinos y darles autenticidad, color e innovación. 

P. ¿En qué se inspiró?

R. La autenticidad y la herencia es algo de lo que hablo mucho. La raíz de los caquis es muy auténtica: los uniformes militares. En ellos cada detalle es muy importante y nos inspiramos para su color, sus botones, sus detalles… Aunque siempre intentamos darles el toque actual, modernirzarlos.

P. Usted, ¿usa Dockers todos los días?

R. Cada día. No he vuelto a vestir otro pantalón desde que puse un pie en esta empresa. Ni siquiera vaqueros.

P. Cuando diseña un par de pantalones, ¿se imagina cómo va a quedar desde todos los ángulos?

R. Sí. Primero imagino cómo quedará el look final, nunca pienso en el pantalón en sí mismo, sino en el total. Ya sea con estilo casual o refinado, siempre lo imagino con el cinturón, la camiseta, la chaqueta, el jersey, el zapato... Pero siempre comienzo por el pantalón. Hace años probablemente se empezaba por la camisa, porque aporta mucha personalidad, y luego la combinaban con el pantalón. Pero a mí me gusta empezar por los pantalones, ya sea por su color, por su tallaje o su estampado. Para mí es la decisión primordial en estilo, la que aporta su personalidad. 

P. En las fotos siempre muestra usted los tobillos. Nunca lleva calcetines.

R. Así es. Ya vaya súper arreglado o casual, los enseño. De joven vestía mucho el viejo pantalón de soldado de mi padre. Me quedaba larguísimo y lo llevaba siempre enrollado. Al principio lo hacía por necesidad y ahora se ha convertido en mi seña de identidad.

P. ¿Por qué decidió teñir los chinos de esos colores tan sorprendentes? 

R. Al estar basados en San Francisco nos inspiramos en las influencias de la ciudad, con una sensibilidad muy casual y llena de colores. Me inspiré en los colores de los mercados de comina, en los de los videojuegos de los ochentas, muchos de ellos inventados aquí... La paleta de colores para la próxima primavera es chocante pero también divertida y muy fresca. El color siempre será una parte muy importante de lo que hacemos.

P. Tuvo que ser controvertida la renovación de la línea.

R. Antes eran un pantalón muy clásico y seguro. La gente pensaba en ellos cuando no podían llevar vaqueros pero tampoco querían ir de traje. Era un pantalón para ocasiones intermedias. Sus posibilidades eran más restringidas. En los últimos tres años hemos aumentado sus opciones de uso: para estar casual, elegantísimo, intermedio...

P. Cuando era un niño, ¿le enfadaba tener menos prendas entre las que elegir comparado con las mujeres?

R. No, siempre buscaba cosas inusuales. Mi madre me recordó hace poco que era el único joven del instituto que llevaba unos náuticos rojos. Pero siempre me encantaba la ropa súper auténtica y clásica aunque luego le daba un giro.

P. ¿Va a haber algún cambio en los colores de los chinos de Dockers en las próximas temporadas? 

R. Ahora mismo estoy trabajando en otoño de 2015 con colores oscuros y más ricos. El color siempre va a ser importante, la gente siempre va a querer expresar su personalidad y su estilo.

P. ¿Por qué se inspiran tantos diseñadores en los uniformes militares?

R. Creo que probablemente no hay un diseñador vivo que no se haya inspirado en el estilo militar. Las chaquetas marineras, las americanas, los pantalones cargo o los caquis… Me encanta lo funcionales que son, todo en ellos se diseñó por algún motivo, tienen mucha intención.

P. ¿Qué novedades va a encontrar el público en sus próximas colecciones?

R. Para primavera de 2015 estamos trabajando en terminados con ingeniería. Yo viajo mucho y quiero estar cómodo pero presentable y con un estilo interesante a la vez. No me gusta llevar mucha ropa y necesito que sea muy versátil. Eso me inspiró para coger nuestras prendas y añadirles toques adicionales. Por ejemplo hemos aumentado el strech en las prendas, para que puedas surcar el océanos y, al llegar, estar elegante y listo para comerte la ciudad. 

P. Acaban de abrir su tienda online. ¿Qué ventajas se van a encontrar sus clientes?

R. Hacemos tantos tipos de pantalones que en las tiendas no caben todos. Intentaremos que conozcan nuestra diversidad e inspirar a los clientes a elegir todo su estilo, no solo los pantalones.