El 40% de los jóvenes dice que recibió poca o ninguna información para estudiar FP

En 2022, el 39,2% de los estudiantes españoles cursaba Formación Profesional, frente al 49% del alumnado en Europa

Alumnos del grado medio de Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería en una clase del centro de formación profesional privado Planeta en L'Hospitalet del Llobregat (Barcelona).massimiliano minocri

La Formación Profesional (FP) se posiciona como una de las opciones formativas más valoradas por la juventud española. El 59% considera que es fundamental para acceder al mercado laboral por la alta empleabilidad que ofrece y la rapidez con la que facilita la inserción laboral. Pero cuatro de cada 10 jóvenes aseguran haber recibido poca o ninguna información sobre esta modalidad educativa, y casi uno de cada tres dice que no obtuvo la orientación adecuada al respecto durante la educación primaria y secundaria. Aunque la FP ha crecido en España en los últimos años, no supera a la formación universitaria. A pesar de los avances, sigue por debajo de la media europea en matriculación. En 2022, el 39,2% de los estudiantes españoles cursaban esta modalidad formativa, frente al 49% del alumnado en Europa. Así lo revela el último estudio del Centro Reina Sofía de Fad Juventud en colaboración con la Fundación Gestamp, presentado este martes tras encuestar en junio de 2024 a 1.255 personas de entre 16 y 29 años.

Los más mayores de dicha franja de edad estudiaron la enseñanza obligatoria en una época en que la FP tenía menos reconocimiento académico y social. Si en el estudio se preguntase solo a los más jóvenes, el porcentaje de quienes afirman no haber recibido información sobre la FP sería, probablemente, menor. Es cierto, en todo caso, que en los institutos los docentes suelen informar mucho más a su alumnado acerca del bachillerato que sobre la FP. Entre otros motivos porque el profesorado de la educación secundaria obligatoria y del bachillerato es el mismo, algo que no sucede normalmente con los docentes de FP. Aun así, el bachillerato ha pasado de tener un 52% más de alumnos que el grado medio de FP a solo un 36%. Y la previsión del Ministerio de Educación es que la distancia siga reduciéndose.

Esta opción académica no está exenta de la brecha de género. Los varones afirman haber recibido más orientación sobre la FP que las mujeres. Un 29,8% de los chicos considera que obtuvo mucha o bastante información, mientras que solo un 17,4% de las jóvenes comparte esta opinión. La participación femenina en FP sigue enfrentado importantes desafíos, entre ellos, una marcada segregación en las áreas de estudio. Las mujeres se concentran, en su mayoría, en sectores como sanidad y servicios sociales, mientras que los hombres predominan en áreas más técnicas como la informática y la electrónica.

La matrícula femenina en la FP ha subido, representando el 46,5% del estudiantado en el curso 2022-2023. Sin embargo, solo un 9% de las mujeres elige estudiar la especialidad de informática y comunicaciones, frente al 24,1% de los hombres. Un 1,2% se decanta por la de electricidad y electrónica, frente al 8,2% en el caso de los varones, lo que refleja una clara división de género en las especialidades. Los estereotipos influyen en las elecciones formativas. A pesar de los avances, ellas optan por áreas menos técnicas, lo que limita su acceso a sectores con mayor demanda y mejor remuneración.

El 36,9% de quienes han terminado su formación de FP encontraron empleo en menos de tres meses y el 22,1% lo consiguió en un plazo máximo de medio año, según el estudio. Casi el 70% valora de forma muy positiva esta opción académica por su alta capacidad de especialización y su aprendizaje eficaz. El 45,6% cree que ofrece más salidas laborales que la universidad.

El alumnado matriculado en FP superó por primera vez el millón en el curso 2021-2022 y la mayoría está adscrito a centros públicos (68,8%). El País Vasco es la comunidad autónoma con mayor porcentaje de titulados en esta opción formativa, seguida de Cantabria y Navarra. La modalidad presencial ronda el 70% del alumnado y la impartida a distancia oscila entre el 6% y el 11%, según sea grado medio o superior. Este último supone alrededor del 52% de las matriculaciones.

Las cinco familias profesionales más demandadas y que representan el 62% del total de matrículas son las del ámbito sanitario, informática y comunicaciones, administración y gestión, servicios socioculturales y comunitarios y comercio y marketing.

La mitad de los jóvenes que no han estudiado FP se ha planteado alguna vez cursar algún grado de esta modalidad. Una de cada tres personas con estudios universitarios valoró alguna vez esta opción, más de la mitad de estudiantes de educación secundaria piensan en decantarse por esta alternativa y uno de cada cuatro jóvenes ve bastante probable elegir este tipo de estudios. Casi la mitad de los alumnos de FP de grado medio se plantea estudiar otra formación similar.

La satisfacción laboral aumenta con el rango educativo. Mientras un 42,2% de titulados en FP de grado superior y un 46,8% de universitarios declaran estar bastante satisfechos con su empleo, solo el 12,7% de jóvenes con bachillerato o FP básica lo están.

Los resultados han sido presentados en el marco del encuentro Formación Profesional y Juventud: retos compartidos, celebrado este martes en la sede de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) con la participación de Cristina Sobrados, directora de Comunicación de Fundación Gestamp, Beatriz Martín Padura, directora general de Fad Juventud, Esther Monterrubio, secretaria general de FP y Antonio Garamendi, presidente de la CEOE.

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