La ONU asegura que 28 euros al año bastan para evitar que un niño muera de hambre

Con 28 euros al año se puede evitar que un niño muera de hambre, según la ONU. Pero las donaciones no cubren esa cantidad, denunciaron ayer representantes de las agencias para la infancia (Unicef) y la educación (Unesco) de Naciones Unidas, en la VII Conferencia Iberoamericana de Infancia y Adolescencia que se celebra en León.

"Es inaceptable que sigamos con altos niveles de malnutrición crónica en los tres primeros años de vida. Hay que erradicarla ya", dijo Nils Arne, portavoz de Unicef. "En los últimos 10 años hemos pasado de 50.000 a 750.000 huérfanos por el VIH. Hemos pasado de cer...

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Con 28 euros al año se puede evitar que un niño muera de hambre, según la ONU. Pero las donaciones no cubren esa cantidad, denunciaron ayer representantes de las agencias para la infancia (Unicef) y la educación (Unesco) de Naciones Unidas, en la VII Conferencia Iberoamericana de Infancia y Adolescencia que se celebra en León.

"Es inaceptable que sigamos con altos niveles de malnutrición crónica en los tres primeros años de vida. Hay que erradicarla ya", dijo Nils Arne, portavoz de Unicef. "En los últimos 10 años hemos pasado de 50.000 a 750.000 huérfanos por el VIH. Hemos pasado de cero países a 14 que tienen más del 1% de la población con sida", dijo el representante de Unicef.

Según la Unesco, los niños de hogares con altos ingresos alcanzan 12 años de escolaridad media, mientras los menos favorecidos sólo estan tres años en la escuela.

Otra lacra es la explotación infantil. Unos 20 millones de niños trabajan en Latinoamérica (246 millones en el mundo) y según explicó Guillermo Dema, de la Organización Internacional del Trabajo, sería necesario emplear 115.000 millones de dólares en los próximos 20 años para garantizar la educación en esta parte del mundo.

"Se calcula que los países latinoamericanos tendrían 345.000 millones de dólares de beneficios si sus niños estuvieran escolarizados y no trabajaran", dijo Dema. "Esto desmonta la idea de que el trabajo infantil es necesario para la supervivencia económica de muchos países, y afianza la idea de que es un lastre para resolver los problemas de pobreza de todas las sociedades", añadió.

"Es difícil de asumir" que más del 40% de la población de los países iberoamericanos viva en la pobreza y, de ellos, la mitad por debajo de la extrema pobreza, dijo el ministro español de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera. El ministro anunció que en 20 años España aportará 240 millones de dólares (200 millones de euros) para "ayudar a salvar la vida a 250.000 niños". La ayuda al desarrollo española llegará al 0,5% del PIB en 2008, y al 0,7% en 2012, recordó.

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