Gauck califica de "ataque a los derechos" la transición española
Se clausura en Berlín un simposiso sobre la memoria histórica
Europa superó un siglo marcado por dictaduras y totalitarismos, el siglo XX, para encontrar un futuro común democrático basado en una conciencia histórica independiente de las ideologías, según quedó de manifiesto en la clausura, ayer en Berlín, del simposio La cultura de la memoria. La memoria histórica en España y Alemania. En su última jornada, el político alemán Joachim Gauck calificó la amnistía general y la transición española de "ataque contra el dominio de los derechos".
El debate, organizado por el Instituto Cervantes y el Instituto Goethe, giró en torno a la memoria que...
Europa superó un siglo marcado por dictaduras y totalitarismos, el siglo XX, para encontrar un futuro común democrático basado en una conciencia histórica independiente de las ideologías, según quedó de manifiesto en la clausura, ayer en Berlín, del simposio La cultura de la memoria. La memoria histórica en España y Alemania. En su última jornada, el político alemán Joachim Gauck calificó la amnistía general y la transición española de "ataque contra el dominio de los derechos".
El debate reflejó la diversidad de relatos sobre la recuperación de la memoria
El debate, organizado por el Instituto Cervantes y el Instituto Goethe, giró en torno a la memoria que hoy se cultiva de la II Guerra Mundial, la reunificación de las dos Alemanias en 1989, la Guerra Civil española, el franquismo y la época de la transición. La reunión reflejó la diversidad de relatos españoles sobre la recuperación de la memoria. Ésta sustituye al anterior discurso "monolítico", según resumió el sociólogo Ignacio Sotelo al finalizar el simposio. Asimismo se vio que la transición, vista durante mucho tiempo como modélica, incluso por otros países europeos, no lo ha sido tanto. Ignacio Olmos, el director del Instituto Cervantes de Berlín, subrayó que "ojalá podamos en pocos años los españoles tener la capacidad autocrítica para crear un solo relato", libre de la confrontación política.
Los alemanes hablaron con cierta distancia de su pasado inmediato, ya que su debate se inició durante los años sesenta, y estuvieron de acuerdo sobre la necesidad de mantener viva la memoria en el discurso público. A diferencia, los españoles se preguntaron si era necesario o no el debate oficial y romper con el silencio pactado en 1977 cuando se constituye la España democrática.
El ex director de la institución que se ocupa de la apertura de los archivos de la central de espionaje de la antigua Alemania oriental, el político Joachim Gauck, reunido ayer con Carlos Elordi y Emilio Silva, explicó al respecto de la transición que "un orden jurídico que no castiga los crímenes públicos vivirá siempre con un defecto congénito".
Gauck, quien se reunió hace dos semanas con políticos a la búsqueda de iniciativas para la recuperación de la memoria en España, destacó que "el punto y final siempre beneficia a los opresores y limita a quienes sufrieron la opresión". No existen monumentos y fechas de conmemoración para las víctimas del franquismo, comentó; en cambio, sí el panteón de Franco. "Mientras no conquiste un espacio público, no existirá una cultura de memoria oficial", expresó Gauck. Elordi, autor de Los años difíciles, advirtió que los familiares de quienes sufrieron el franquismo no tienen "ninguna voluntad de contribuir a ninguna dinámica política". "La necesidad es que se sepa" y, por lo tanto, el periodista concluyó que "la recuperación de la memoria no debe ser instrumento de batalla política".
Según Gauck, la izquierda española debería hacer causa común con la derecha: "Si la memoria se vuelve un asunto de partidos políticos, fracasará, igual que en Polonia y Hungría. Busquen dentro del grupo conservador a personas sensibles y con un sentido de derecho" para encaminar un proceso de reconciliación.