El Ayuntamiento de Palma busca nuevo director para la Fundación Miró

El Ayuntamiento de Palma, de mayoría del PP, que controla la Fundación Pilar y Joan Miró de Mallorca y que ha decidido el cese del director del centro Aurelio Torrente -con la oposición de los mecenas, la familia Miró-, ha efectuado contactos y sondeos privados para seleccionar a un posible nuevo responsable de la institución cultural. Las consultas y gestiones han sido en ámbitos externos a la Administración y también en el seno de los propios centros municipales.

Una comisión de gobierno de la fundación -que no debatió la decisión de la destitución que el PP adelantó antes a los medio...

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El Ayuntamiento de Palma, de mayoría del PP, que controla la Fundación Pilar y Joan Miró de Mallorca y que ha decidido el cese del director del centro Aurelio Torrente -con la oposición de los mecenas, la familia Miró-, ha efectuado contactos y sondeos privados para seleccionar a un posible nuevo responsable de la institución cultural. Las consultas y gestiones han sido en ámbitos externos a la Administración y también en el seno de los propios centros municipales.

Una comisión de gobierno de la fundación -que no debatió la decisión de la destitución que el PP adelantó antes a los medios de comunicación- agradeció 'los servicios prestados a Torrente', que está previsto que a finales de agosto abandone el cargo en el que se mantiene desde 1997. Los herederos de Joan Miró confían en que su protesta pública contra este cese y el anuncio de que retirarán sus fondos privados de la fundación surtan efecto y la mayoría municipal del PP reconsidere su decisión y renueve el contrato a Torrente.

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En todo caso, el sustituto de Torrente tendría un contrato de menos de un año, hasta que transcurran las próximas elecciones de mayo de 2003 y se haya formado el nuevo equipo de gobierno municipal. El alcalde de Palma, Juan Fageda, del PP, se quejó por haber conocido por este diario las quejas de los herederos de Miró y su decisión de recoger sus colecciones particulares de la fundación, como queja por la destitución del director, en cuya gestión confiaban.

El alcalde y la familia

Fageda se amparó en una carta de protesta del personal de la fundación para no renovar el contrato de Torrente y puso al mismo nivel y rango la posición de los mecenas, los Miró. '¿A quién hago caso? ¿qué les he hecho yo a la familia Miró?', se preguntó el alcalde, quien ponderó al director cesante y señaló que el Ayuntamiento hace todo cuando puede para apoyar a la fundación.

Los herederos del artista reprendieron el año pasado al alcalde por el escaso papel institucional y cultural que desempeñó cuando, en compañía de cinco personas vinculadas al Ayuntamiento, aceptó una invitación a Nueva York con motivo de una exposición de Joan Miró. La numerosa comitiva no acudió a la inauguración oficial y marginó a los representantes familiares.

Meses atrás, Juan Fageda cuestionó abiertamente el desinterés en el mecenazgo del pintor Joan Miró al crear la fundación de Palma. Este argumento lo usó para defender el proyecto de Museo de Arte Moderno y Contemporáneo de Palma, realizado ex profeso para albergar la colección privada del empresario periodístico, Pedro Serra.

Los partidos de la izquierda han reclamado una explicación urgente al Partido Popular y la celebración de una sesión de la junta de portavoces del Ayuntamiento para abordar la crisis que,de carácter patrimonial y cultural, se ha abierto en la Fundación Pilar y Joan Miró de Palma.

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