Reportaje:HISTORIAS DEL COMER

El mundo de los sentidos

Se ha dicho que la grasa más noble del mundo es el aceite de oliva virgen en su calidad extra. Rizando el rizo y añadiendo un nuevo valor a esta grasa se habla ya de los aceites biológicos. El aceite riojano Isul es un buen ejemplo. Se trata de un producto natural, zumo del fruto del olivo, obtenido exclusivamente por procedimientos físicos. Lo elabora una empresa familiar que apostó desde hace unos años, por respeto al medio ambiente al laborear su olivar según los métodos de agricultura ecológica (sin herbicidas ni fertilizantes químicos).Pero también comprendieron que sus esfuerzos, de una ...

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Se ha dicho que la grasa más noble del mundo es el aceite de oliva virgen en su calidad extra. Rizando el rizo y añadiendo un nuevo valor a esta grasa se habla ya de los aceites biológicos. El aceite riojano Isul es un buen ejemplo. Se trata de un producto natural, zumo del fruto del olivo, obtenido exclusivamente por procedimientos físicos. Lo elabora una empresa familiar que apostó desde hace unos años, por respeto al medio ambiente al laborear su olivar según los métodos de agricultura ecológica (sin herbicidas ni fertilizantes químicos).Pero también comprendieron que sus esfuerzos, de una rigurosa recolección ecológica eran vanos si no existía una almazara que elaborara las olivas con métodos respetuoso con la naturaleza, eliminando el vertido de alpechín (poderoso contaminante), molturando a poca velocidad y en frío para garantizar la conservación de los aromas y vitaminas y dando más importancia a la calidad que la rendimiento. De ahí la creación de esta avanzada almazara ecológica que cuida hasta los últimos detalles, tales como la elección de envase de vidrio, transparente parar admirar el provocador color verde del aceite y el estuchado de todas las botellas para evitar que la luz y el calor perjudiquen sus cualidades.

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Un aceite en el que interviene en solitario la mediterránea aceituna arbequina. Feucha y arrugada, humilde tan sólo en apariencia ya que encierra un gran abanico de matices gustativos y aromáticos. De gran intensidad herbácea y amargor almendrado muy delicado y poseedora de un posgusto interminable y complejo. Es cierto también que todo este cúmulo de virtudes, entrar en este mundo de los sentidos, tiene su precio, también de alto nivel (medio litro, 1.380 pesetas).

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