La apuesta por Internet

Las nuevas tecnologías, e Internet en particular, serán el motor del empleo y de la productividad y deben permitir que la economía siga creciendo sin generar inflación. Es el modelo que triunfa en Estados Unidos y que la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno europeos ha consagrado como modelo el pasado fin de semana en Lisboa.La cumbre ha lanzado el mensaje de más mercado, más liberalización de las telecomunicaciones. También ha abordado medidas como el acceso de todos los colegios a Internet para el año 2001 y formación del profesorado para el 2002 en esta materia.

Tras el paso dado ...

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Las nuevas tecnologías, e Internet en particular, serán el motor del empleo y de la productividad y deben permitir que la economía siga creciendo sin generar inflación. Es el modelo que triunfa en Estados Unidos y que la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno europeos ha consagrado como modelo el pasado fin de semana en Lisboa.La cumbre ha lanzado el mensaje de más mercado, más liberalización de las telecomunicaciones. También ha abordado medidas como el acceso de todos los colegios a Internet para el año 2001 y formación del profesorado para el 2002 en esta materia.

Tras el paso dado en Lisboa, el objetivo es aprobar en la cumbre europea de junio un calendario con metas concretas. Se busca liberalizar las telecomunicaciones en 2001, un impulso del comercio electrónico en Europa, reducir el precio de acceso a Internet, acceso de todos los colegios a la red y fomentar la investigación y el desarrollo (I+D) de las empresas.

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En España se aguarda a la formación del nuevo Gobierno para empezar a poner en marcha estas medidas, dicen fuentes de Hacienda, el departamento encargado de acotar el gasto que debe hacerse desde los Presupuestos Generales del Estado.

Para este año, las cuentas del reino tienen ya poco margen, porque van camino de la mitad del ejercicio. Con todo, las fuentes de Hacienda recuerdan que en el Presupuesto de este año ya se ha hecho un esfuerzo en ayudas fiscales para I+D y para innovación tecnológica. La Ley de Innovación Tecnológica -aprobada tras serios roces entre los ministros Rodrigo Rato y Josep Piqué- destina este año 508.120 millones de pesetas para investigación, un 10,5% más que el año pasado. Se potencia la deducción en el impuesto de sociedades, con deducciones entre el 30% y el 50% por los gastos en I+D de las empresas y sube hasta el 60% la deducción por gastos de personal investigador y proyectos contratados con universidades.

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