La Fundación Santillana reúne 50 ejemplos de la iconografía boliviana

La apertura de la exposición El retorno de los ángeles. Barroco de las cumbres en Bolivia reunió anoche en la Torre de Don Borja a destacadas personalidades de la cultura, la diplomacia y la política de aquel país y de España: representantes de la Fundación Santillana, que acoge la muestra; Unión Latina; Comisión Europea y comunidad autónoma de Cantabria estuvieron junto a Ximena Iturralde Monje, primera dama de la República boliviana; el presidente de Cantabria, José J. Martínez Sieso, y el secretario de Estado de Cultura de España, Miguel Ángel Cortés, acompañados por Jesús de Polanco.
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La apertura de la exposición El retorno de los ángeles. Barroco de las cumbres en Bolivia reunió anoche en la Torre de Don Borja a destacadas personalidades de la cultura, la diplomacia y la política de aquel país y de España: representantes de la Fundación Santillana, que acoge la muestra; Unión Latina; Comisión Europea y comunidad autónoma de Cantabria estuvieron junto a Ximena Iturralde Monje, primera dama de la República boliviana; el presidente de Cantabria, José J. Martínez Sieso, y el secretario de Estado de Cultura de España, Miguel Ángel Cortés, acompañados por Jesús de Polanco.

Jesús de Polanco, presidente de la Fundación Santillana, expresó su confianza en que "la misma conmoción estética que la contemplación de los cuadros en París suscitó entre los franceses" se repita ahora entre los españoles que visiten la torre de Don Borja, durante largos años abierta al fomento y expansión de las relaciones iberoamericanas. "Teníamos", expresó De Polaco, "una deuda de gratitud y reconocimiento hacia Bolivia que ahora cumplimos con la presentación de esta bella colección artística".El presidente boliviano Gonzalo Sánchez de Lozada, que comparte con el presidente español José María Aznar el patrocinio de honor de la exposición, espera que en Santillana se establezca desde ahora un punto de encuentro para promover un mejor conocimiento entre los dos países y una fructífera aproximación de las respectivas culturas.

En opinión del secretario de Estado de Cultura, Miguel Ángel Cortés, hace mucho tiempo que la Fundación Santillana sabe que América es el espacio preferente de nuestro ámbito cultural y "es absurdo que alguien pueda pensar que esa visión sea incompatible con una opción europea". "Europa y América se constituyen para España", añadió, "en elementos culturales mutuamente fértiles y son parte de eso que llamamos civilización occidental". Recordó Cortés que Santillana ha albergado varias exposiciones que prueban la visión abierta de la fundación. "Aquí hemos podido ver Arte y cultura del Cuzco, Imágenes de México o Una visión de Colombia, pero también una muestra de expresionistas franceses, otra de cultura china y muchas más. Esto no es un desvío, sino una afirmación de europeidad".

"Es la firme opinión del Gobierno", precisó Cortés, "que lo más antieuropeo en material cultural son precisamente las barreras, las cuotas y la censura que se cubre con el disfraz de la corrección política".

La mayoría de los 50 lienzos que integran la muestra, abierta hasta el 20 de marzo, es obra de artistas anónimos, pero la influencia de la pintura española es notoria en la iconografía.

Se comprende así que Melchor Pérez de Holguín, escultor y arquitecto, considerado el gran pintor del barroco boliviano, sintiese la influencia artístíca de Zurbarán. Otro español, Pedro Vargas, que aparece como autor del cuadro La Vírgen y el Niño con santos jesuitas, fue auxiliar del italiano Bernardo Bitti, destacado introductor de la pintura italiana en Perú.

En el lago Titicaca

Según los historiadores bolivianos José de Mesa y Teresa Gisbert, designado el primero comisario de la muestra, el origen de la iconografía de los ángeles se remonta a los primeros siglos del cristianismo. Pero hay que esperar al periodo comprendido entre los siglos XVI y XVIII para que en el entorno del lago Titicaca se produzca un febril nomadeo de artistas que pintan ángeles en su mayor parte ignorados por la Biblia.Entre ellos, hay personajes exóticos, que visten prendas militares, otros que se adornan con rosones rojos, algunos que portan espadas flamígeras y arcabuces.