Drástica reducción de galas veraniegas por la crisis económica y el cambio municipal

No hay listas negras. Las contrataciones veraniegas, tras el cambio político en más 3.000 municipios, se retrasaron hasta el timo momento para desconcierto de los artistas. Representantes y agentes coinciden en que la suspensión de conciertos por motivos políticos es excepcional (aunque se ha producido dos veces con Joaquín Sabina y una con Pablo Milanés y Víctor Manuel), y se trata más de un problema de personas que de instituciones. Ha habido muchas más cancelaciones, pero por razones económicas: los nuevos ediles se han encontrado con las arcas vacías.

La escena está dominada por Kik...

No hay listas negras. Las contrataciones veraniegas, tras el cambio político en más 3.000 municipios, se retrasaron hasta el timo momento para desconcierto de los artistas. Representantes y agentes coinciden en que la suspensión de conciertos por motivos políticos es excepcional (aunque se ha producido dos veces con Joaquín Sabina y una con Pablo Milanés y Víctor Manuel), y se trata más de un problema de personas que de instituciones. Ha habido muchas más cancelaciones, pero por razones económicas: los nuevos ediles se han encontrado con las arcas vacías.

La escena está dominada por Kiko Veneno, Joaquín Cortés, Rosario, Siniestro Total o Víctor Manuel y Pablo Milanés. Pero ya no se contratan giras para todo el verano. Aquello pasó a la historia. Paco Lucena, productor discográfico y representante, entre otros, de Joaquín Sabina, Carlos Varela, José Manuel Soto y Académica, Palanca, afirma: "La década de los ochenta fue la edad de oro de las galas veraniegas. Comunidades, ayuntamientos e instituciones tenían una gran capacidad de contratación. Pero la gallina de los huevos de oro dejó de poner en 1990. A partir de entonces, la situación ha ido a peor. Este año es desastroso".Gloria Diez, de la oficina Nox -lleva la contratación de artistas como la Vieja Trova Santiaguera (20 galas), Radio Tarifa (20) o Pablo Guerrero- opina de forma parecida a Lucena. "Efectivamente, no hay un duro. Nosotros no hemos tenido problemas de contratación por motivos políticos; sí por motivos económicos", dice Diez.

Juanjo Melero, de Animal Tour, confirma los datos anteriores. "Estamos firmando galas veraniegas con cuentagotas y de una semana para otra", afirma. Como ejemplo del desmadre Melero cita el caso de Juan Perro. Las previsiones para Santiago Auserón -Raíces al viento, su último disco en el mercado, vendió 50.000 ejemplares en la primera semana de publicación- parecían inmejorables y, sin embargo, todavía se están realizando contrataciones para lo que queda del verano.

Faltos de dinero, los ayuntamientos han recurrido en muchas ocasiones a ceder recintos (plazas de toros, polideportivos, campos de fútbol) y los artistas a hacerse empresa, con todos los riesgos que ello comporta. Esta solución, en la práctica, sólo puede ser asumida por los grandes del verano. A veces, les resulta más rentable que actuar por su caché habitual. La reaparición de los inversores privados es otra de las novedades del verano. El pasado Festival de Benícassim y el macro festival de Pop-rock que se celebrará en Badalona el 9 de septiembre son una muestra del nuevo estilo. Alejandro García, alcalde por el PP de la localidad alicantina de Benícassim, organismo que cedió el. local donde se celebró el evento al que asistieron 8.000 personas, explicaba así su impresión de lo ocurrido: "Gracias a Dios todo ha salido estupendamente. Al principio teníamos cierto temor por la gente que iba a venir, pero ha sido un éxito de público, han dado una lección de civismo y educación".

Benícassin no es el único caso. Parece, de momento, que no existe ningún tipo de consignas políticas a la hora de contratar artistas. Prima más la peculariedad de un personaje que las consignas. De hecho, sólo se han constatado rescisiones de contratos que podrían denominarse políticos en tres ciudades gobernadas por el PP: Villanueva de la Serena (Joaquín Sabina), Vigo (Joaquín Sabina) y El Ferrol (Víctor Manuel y Pablo Milanés). La anécdota más montaraz fue la de Villanueva de la Serena. La nueva alcaldesa, María del Carmen Serradilla, se manifestó lacónica y tajante con José Ayuso, uno de los principales agentes artísticos de la zona en Extremadura: "Mientras yo sea alcaldesa, Joaquín Sabina no actúa en este pueblo". Dicho y hecho: el 22 de julio dio por nulo el contrato de Sabina7 en el campo de fútbol. En su lugar, contrató a Rosario.

Pero como el artista tiene mucho tirón en la zona, su representante, Paco Lucena, preparó una actuación del cantante, el mismo día y a la misma hora, a dos kilómetros escasos de la localidad, en la discoteca Trípode, del municipio de Don Benito (Badajoz). Unos días antes, los organizadores intentaron pegar carteles en Villanueva de la Serena. La alcaldesa, fiel a sí misma, ordenó a la Policía Municipal que impidiera la pegada, aduciendo la "falta de espacio para este tipo de publicidad".

Los que más cobran

El cantante que más cobra por gala este verano es el colombiano Carlos Vives, el rey del vallenato: 12 millones. Le siguen Rocío Jurado (8 millones), El último de la- Fila (7), Joaquín Sabina (en tomo a los 6) y Víctor Manuel y Pablo Milanés (6 millones). Las cifras a las que se encarama el colombiano hanprovocado varias rescisiones de contrato. Por ejemplo, en Almendralejo (Badajoz).Seguramente, el cantante español que más trabajo tiene durante este verano es José Manuel Soto, con casi 60 actuaciones programadas. Paco Lucena, representante del artista, ha logrado esta hazaña estrujando la imaginación y copiando lo que se hacía antiguamente: los cantantes no llevan grupo propio, sino que actúan en cada ciudad con una orquesta local. Soto consigue así una media de millón y pico por gala.

Otro ejemplo curioso es el de Sergio Dalma que, sin disco re ciente en el mercado, es uno de los cantantes más contratados este verano. No es el caso de Norma Duval. La vedette, reconocida militante del PP, ha des mentido en una emisora de radio que hayan aumentado sus actuaciones con el cambio político en numerosos ayuntamientos.