Mozart para niños

El teatro de la Zarzuela ha tenido la buena idea de organizar unas funciones de ópera para niños y muchachos, basándose en el singspiel, de Mozart. Se trata de El director de teatro, una breve pieza con parlamentos, cuatro números cantados y una obertura.Por la forma y el tema -las rivalidades entre las divas y los quebraderos que ocasionan al director de teatro- la operita ha sido objeto de muchas adaptaciones y ampliaciones. Así ha hecho ahora Gustavo Tambascio al trazar unas escenas previas, levemente alusivas a nuestra actualidad, como Mozart aludió a las de su tiempo.
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El teatro de la Zarzuela ha tenido la buena idea de organizar unas funciones de ópera para niños y muchachos, basándose en el singspiel, de Mozart. Se trata de El director de teatro, una breve pieza con parlamentos, cuatro números cantados y una obertura.Por la forma y el tema -las rivalidades entre las divas y los quebraderos que ocasionan al director de teatro- la operita ha sido objeto de muchas adaptaciones y ampliaciones. Así ha hecho ahora Gustavo Tambascio al trazar unas escenas previas, levemente alusivas a nuestra actualidad, como Mozart aludió a las de su tiempo.

El diálogo es ingenioso y la acción, en la que juegan elementos circenses y sorpresas de fantasía, prepara la entrada de la "comedia con música", con los parlamentos en castellano y subtítulos para los números cantados. Todo lo cual hizo feliz a un público infantil que llenó el teatro y se comportó mejor que en algunas ocasiones lo hacen los mayores. El programa de mano, verdaderamente delicioso, lo escribió Fernando Palacios y lo dibujaron escolares del colegio Montserrat.

La idea, la escena, muy bien movida por Tambascio, la dirección musical del joven maestro Andrés Zarzo, el canto de Ángeles Blancas y Ana Rodrigo, y la dramaturgia de todos los demás, marcan una línea a seguir para familiarizar al público escolar con el espectáculo operístico.