Diáspora en tutú

Hace apenas tres semanas el coreógrafo Alberto Alonso, uno de los fundadores del Ballet Nacional de Cuba y de la reputada escuela cubana de ballet pidió asilo político en Nueva York junto a su esposa, la bailarina Sonia Calero. En los pasillos del Gran Teatro de La Habana no se habla todavía de otra cosa. Alberto Alonso es un pilar insustituible de la historia de la danza cubana y ha sido la gota que colma el vaso de la desmembración del ballet cubano. Su hermano Fernando, primer marido de Alicia y quien le dio el ya mítico apellido, vive en México y es director desde hace tres años del Ballet...

Hace apenas tres semanas el coreógrafo Alberto Alonso, uno de los fundadores del Ballet Nacional de Cuba y de la reputada escuela cubana de ballet pidió asilo político en Nueva York junto a su esposa, la bailarina Sonia Calero. En los pasillos del Gran Teatro de La Habana no se habla todavía de otra cosa. Alberto Alonso es un pilar insustituible de la historia de la danza cubana y ha sido la gota que colma el vaso de la desmembración del ballet cubano. Su hermano Fernando, primer marido de Alicia y quien le dio el ya mítico apellido, vive en México y es director desde hace tres años del Ballet Nacional de ese país.Madrid ha sido tradicionalmente el lugar escogido para desertar por los bailarines cubanos. Previamente a este grupo, Rubén Rodríguez, primer bailarín de Danza Nacional Moderna de Cuba y pareja de la hija de Raúl Castro, huyó en el aeropuerto de Barajas mientras era devuelto a La Habana desde Alemania.

La primera bailarina Dagmar Moradillo, una de las promesas de la nueva generación y actualmente en Miami, desapareció de su hotel madrileño junto al jefe técnico de la compañía: actualmente trabajan en el Ballet de la Opera de Miami. La responsable de prensa, Belkis de León, también actualmente en Estados Unidos, hizo lo mismo al tiempo que la directora de la orquesta del ballet cubano, Marlene Urbay, que escogieron España para no volver. Otros, con el subterfugio de permanecer contratados fuera de Cuba como "artistas independientes" de hecho son emigrantes laborales. Así están los más que brillantes artistas Julio Arozamena, Andrés Williams, Domingo Rojas, Lorena Feijoó, Ana Lobé y Jesús Corrales. El gerente de relaciones internacionales, Felipe Quintero, trabaja actualmente en el Ballet de Euskadi, donde también reside como maestra invitada Mirta Pla.

Jorge Esquivel, principal figura del ballet cubano y con sólida reputación internacional, fue muchos años pareja de Alicia Alonso, y pidió asilo en la embajada norteamericana de Roma a mediados de este año. Al llegar a EE UU declaró: "Muchos de mis compañeros querrían hacer esto, pero no pueden o no se atreven. Quería ser libre como persona, y en mi baile".