Ensayos con decenas de ratones permitirán identificar el brote de botulismo en Madrid

El Instituto Nacional de Toxicología y el Instituto de Salud Carlos III analizan muestras biológicas de los pacientes afectados de botulismo y de los alimentos que consumieron para hallar la toxina responsable. La operación precisa un mínimo de 36 horas y el sacrificio de decenas de ratones. Se espera que los resultados se hagan públicos mañana. Varios comercios de Madrid capital seguían ayer sin notificación oficial sobre los productos afectados. En el resto de la región y en otras ocho comunidades se inmovilizaron cautelarmente los lotes sospechosos de las tres marcas investigadas.

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El Instituto Nacional de Toxicología y el Instituto de Salud Carlos III analizan muestras biológicas de los pacientes afectados de botulismo y de los alimentos que consumieron para hallar la toxina responsable. La operación precisa un mínimo de 36 horas y el sacrificio de decenas de ratones. Se espera que los resultados se hagan públicos mañana. Varios comercios de Madrid capital seguían ayer sin notificación oficial sobre los productos afectados. En el resto de la región y en otras ocho comunidades se inmovilizaron cautelarmente los lotes sospechosos de las tres marcas investigadas.

Mientras en la Comunidad de Madrid el tema "está bastante controlado", según uno de los veterinarios que realiza las inspecciones, en el área de la capital, competencia del Ayuntamiento, varios comercios seguían ayer sin haber recibido notificación alguna sobre la retirada de algunas partidas de tres marcas de conservas, informa . La intoxicación provocó el pasado fin de semana la muerte de un anciano y la hospitalización de otras tres personas de Coslada (Madrid). Los afectados evolucionaban ayer favorablemente.En la Comunidad de Madrid, exceptuando la capital, se ha inmovilizado un total de 11.627 envases de algunos lotes de las marcas de judías envasadas en cristal Conservas Martínez y Digsa (con fecha de caducidad 1995) y la de alcachofas en lata Konig. De cada lote se han tomado muestras para su análisis. Los dos primeros fabricantes hicieron públicos ayer sendos comunicados expresando la garantía de sus productos y la disconformidad por la forma en que la Administración Pública ha implicado a tres conserveras sin tener datos concluyentes. El ayuntamiento de Madrid no facilitó ayer información sobre los envases inmovilizados.

Tres toxinas

El botulismo es una infección de carácter muy grave pero poco frecuente en la actualidad en España. Este caso es el primero que se produce en Madrid en dos años, según fuentes sanitarias. Cuando esta infección, provocada por el bacilo Clostridium Botulinum, es de origen alimentario, están implicadas hasta tres toxinas diferentes: los tipos A y B, relacionados con conservas vegetales, y el E, con las de pescado. El bacilo se destruye en las conservas mediante esterilización, pero si por algún defecto en este proceso siguiera presente, comienza, a producir la toxina botulínica, responsable de la intoxicación.La identificación del tipo de toxina en los restos alimenticios se está efectuando en el Instituto Carlos III, mientras en el Instituto Nacional de Toxicología se analizan muestras digestivas, de suero y de heces de los afectados. En ambos casos se utilizan ensayos sobre ratones, "hasta 18 animales", según explica Pilar Gascó, del Instituto Nacional de Toxicología. Tras establecer varios grupos de ratones, se inocula a uno de ellos la muestra contaminada y al resto, respectivamente, la muestra y los antídotos correspondientes a los tipos de toxina. "Hay que esperar entre 18 y 36 horas hasta que los animales desarrollen la infección y, tras ello, comprobar el grupo que sobrevive".

El 90% de los casos de botulismo tiene su origen en las conservas caseras. Tras un periodo de incubación de hasta 8 días, se manifiestan, entre otros síntomas, sequedad de boca, visión doble, náuseas, vómitos y diarreas.

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