Maragall sugiere en privado un calcetín de Tàpies a escala reducida

El artista no ha recibido ninguna propuesta

El alcalde de Barcelona, Pasqual Maragall, planteó en días pasados, en conversaciones privadas, una propuesta que, a su criterio, serviría para superar la polémica ciudadana e institucional generada por la escultura creada por Antoni Tàpies para el Salón Oval del Palau Nacional de Montjuïc, sede barcelonesa del Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC). La idea de Maragall consiste en proponer a Tàpies la realización de su escultura en bronce y de un tamaño inferior al planeado, para colocarla en una esquina del Salón Oval.

, Portavoces de la alcaldía negaron que el Ayuntamiento ...

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El alcalde de Barcelona, Pasqual Maragall, planteó en días pasados, en conversaciones privadas, una propuesta que, a su criterio, serviría para superar la polémica ciudadana e institucional generada por la escultura creada por Antoni Tàpies para el Salón Oval del Palau Nacional de Montjuïc, sede barcelonesa del Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC). La idea de Maragall consiste en proponer a Tàpies la realización de su escultura en bronce y de un tamaño inferior al planeado, para colocarla en una esquina del Salón Oval.

, Portavoces de la alcaldía negaron que el Ayuntamiento haya entrado en la polémica, cuya decisión final corresponde al patronato del MNAC, pero no desmintieron que Maragall formulase la idea a título personal. El alcalde Pasqual Maragall manifestó su idea en conversaciones privadas con personas no vinculadas al proyecto de la escultura ni al MNAC y su propósito, de acuerdo con los testimonios recogidos por este diario, era superar de manera satisfactoria para todas las partes implicadas la polémica ciudadana e institucional generada por el proyecto de escultura de Tápies para el Palau Nacional.

Los criterios del alcalde para llegar a esa propuesta fueron, según afirman los mismos testimonios, el hecho de que Tápies ha realizado obras escultóricas en bronce a partir de imágenes de su lenguaje plástico y la consideración de que el calcetín no perdería su fuerza visual pese a la reducción de tamaño y el cambio de ubicación, que lo desplazaría de la zona central del Salón Oval hacia una esquina del recinto. El alcalde de Barcelona trató ayer de matizar su sugerencia privada diciendo que "no se me ocurriría nunca decirle a un artista lo que tiene que hacer", aunque al ser preguntado si su sugerencia era apócrifa o falsa, respondió: "yo no digo que sea mentira".

Fuentes próximas a Antoni Tápies explicaron ayer a este diario que el pintor -que se encuentra fuera de Barcelona- no ha tenido ninguna noticia -"ni oficial ni oficiosa", según la citada fuente- de una hipotética propuesta de modificación de su proyecto de escultura para el, Salón Oval del Palau Nacional, ni tampoco de una decisión final del Patronato del MNAC acerca de la realización de la escultura.

Material no negociable

"En todo caso", precisó la persona consultada, "se puede asegurar con un 90% de certidumbre que Tápies no aceptaría ese tipo de modificaciones, ya que la obra no funcionaría con esos condicionamientos. Está claro que la escultura puede tener un par de metros más o menos de lo previsto y es cierto que Tápies ha hecho otras obras en bronce, pero es prácticamente seguro que los materiales y la ubicación de este proyecto no son negociables para el artista". Pere Durán Farell, presidente del patronato del MNAC, sugirió ayer en conferencia de prensa que los medios de comunicación dejen de insistir en el calcetín, porque, a su juicio, Ia importancia del museo no puede verse reducida a una polémica sobre la ubicación de la obra de Antoni Tàpies".

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