Irritación en el Gobierno chileno al mofarse Pinochet de cadáveres de desaparecidos
El Gobierno chileno calificó ayer de crueles y ofensivas para el país las expresiones del jefe del Ejército, el general Augusto Pinochet, quien consideró un gran ahorro la presencia de dos cadáveres por tumba en una exhumación mas]va de cuerpos de personas muertas en la represión después del golpe militar de 1973. La Justicia está excavando desde el lunes en el principal cementerio de Santiago 104 tumbas sin identificación de los cuerpos sepultados, que se cree corresponden a detenidos desaparecidos.
En las prirneras cinco tumbas exhumadas aparecieron 10 cuerpos, algunos de ellos mu...
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El Gobierno chileno calificó ayer de crueles y ofensivas para el país las expresiones del jefe del Ejército, el general Augusto Pinochet, quien consideró un gran ahorro la presencia de dos cadáveres por tumba en una exhumación mas]va de cuerpos de personas muertas en la represión después del golpe militar de 1973. La Justicia está excavando desde el lunes en el principal cementerio de Santiago 104 tumbas sin identificación de los cuerpos sepultados, que se cree corresponden a detenidos desaparecidos.
En las prirneras cinco tumbas exhumadas aparecieron 10 cuerpos, algunos de ellos mutilados. "Pero qué economía [ahorro] más grande"., comentó Pinochet cuando los periodistas le consultaron sobre el macabro hallazgo. El general y ex dictador felicitó a .los "buscadores de cadáveres" y reiteró su tesis de que en Chile hubo una guerra irregular en 1973, "muy bien planeada por la KGB". El ministro portavoz del Gobierno, Enrique Correa, dijo ayer estar muy asombrado con las declaraciones de Pinochet. "Estas crueles expresiones ofenden el dolor de los deudos y ofenden la sensibilidad del país", señaló. Familiares de las víctimas, que aguardan en el cementerio los resultados de la exhumación expresaron su indignación con Pinochet. El jefe del Ejército se reunió ayer con el presidente Patricio Aylwin en el palacio de la Moneda, en una cita prevista con anterioridad. Grupos de manifestantes le gritaron "asesino" y "Pinochet al paredón" cuando el general entraba en el palacio. El Gobierno no dijo si Aylwin trató el tema en la reunión con Pinochet, aunque el ex dictador sostuvo que fue a invitar al presidente a un cóctel.