Láser cortante contra el glaucoma

Una nueva técnica permite curar el 80% de las afecciones mediante una operación ambulatoria

La colaboración entre la cátedra de Oftalmología y la de Anatomía Humana de la facultad de Medicina de la universidad de Barcelona ha logrado poner a punto una nueva técnica que permite operar el glaucoma, con los mismos resultados que una operación quirúrgica, mediante una sencilla intervención ambulatoria. La nueva técnica aporta como novedad la utilización del láser cortante para la extracción del trabéculo, lo que permite mejorar sustancialmente los resultados hasta ahora obtenidos en Ia intervención con el láser de argón. La ONCE y la universidad de Barcelona acaban de firmar un convenio ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La colaboración entre la cátedra de Oftalmología y la de Anatomía Humana de la facultad de Medicina de la universidad de Barcelona ha logrado poner a punto una nueva técnica que permite operar el glaucoma, con los mismos resultados que una operación quirúrgica, mediante una sencilla intervención ambulatoria. La nueva técnica aporta como novedad la utilización del láser cortante para la extracción del trabéculo, lo que permite mejorar sustancialmente los resultados hasta ahora obtenidos en Ia intervención con el láser de argón. La ONCE y la universidad de Barcelona acaban de firmar un convenio por el que la primera subvenciona el desarrollo de esta nueva técnica.

El glaucoma es, con las cataratas y la diabetes, una de las tres principales causas de ceguera. Su incidencia en España alcanza el 1,5% de la población general y en la población de más de 45 años, el 2,3%. Es una enfermedad traidora, porque puede estar latente durante 10 años sin ofrecer síntomas y en sus estadios más graves causa la ceguera total- "El glaucoma se caracteriza por un aumento de la presión del ojo a causa de la obturación del trabéculo" explica el profesor Demetrio Pita Salorio, catedrático de Oftalmología. El trabéculo es un tejido en forma de esponja por el que se libera al exterior el humor acuoso del globo ocular. No se sabe por qué causa, en determinadas personas comienza a depositarse en los orificios del trabéculo una sustancia que acaba obturándolo. Cuando se obtura el trabéculo, aumenta la presión ocular, y acaba dañándose el nervio óptico. A partir de determinado estadio, el tratamiento flarmacológico no ofrece resultados satisfactorios por lo que es preciso afrontar la enfermedad mediante una intervención quirúrgica.

Extirpar el trabéculo

Tradicionalmente se ha combatido el glaucoma mediante la extirpación del trabéculo en una intervención quirúrgica. La operación ofrece resultados positivos, según el profesor Pita Salorio, en el 80% de los casos pero comporta riesgos quirúrgicos. La aplicación del láser en oftalmología ha permitido tratarlo sin necesidad de intervención quirúrgica y hacerlo además en régimen ambulatorio.Pero el láser que hasta ahora se ha utilizado, el llamado láser de argón, actúa quemando la parte del trabéculo obturado. "El problema es que, como este tejido tiene la forma de una esponja, al quemarlo se produce muchas veces un encogimiento que acaba obturándo de nuevo la parte intervenida", explica el doctor Carles Vergés, profesor del departamento de Oftalmología. El láser de yag, en cambio, es cortante y extraordinariamente certero, por lo que permite extirpar el trabéculo con un grado de precisión que se mide por micras.

Es aquí donde interviene el equipo de Anatomía, integrado por el catedrático Domingo Ruano y el doctor Jesús Costa.Para que el láser yag pueda ser utilizado correctamente, es preciso tener un conocimiento muy certero del lugar en el que debe aplicarse. El desarrollo de la nueva técnica ha precisado un minucioso trabajo de experimentación en ojos donados que no eran aptos para el el trasplante. "Lo hemos podido hacer porque hemos tenido a nuestra disposición el microscopio electrónico de barrido del Servicio Central de Microscopia Electrónica de la Universidad de Barcelona", puntualiza el doctor Ruano. "Nos ha permitido estudiar la estructura del trabéculo en imágenes de hasta 10.000 aumentos", añade el doctor Costa. Este detalle y la audacia explican que el equipo de Barcelona sea en estos momentos pionero, al menos a efectos de publicación de resultados, en una técnica que se estaba desarrollando al mismo tiempo en Boston (Estados Unidos) y Berna (Suiza).

La nueva técnica ha sido ya propada en varios cientos de pacientes. El control durante 12 meses de 350 de ellos ha permitido establecer que la intervención era efectiva en el 80%. de los casos y, que el nivel de complicaciones -corrimiento de células del endotelio, inflamación temporal o aumento pasajero de la presión- pueden disiminuir si se perfecciona.

Archivado En