ECOLOGÍA

El Gobierno renueva el permiso para verter tóxicos en la bahía de Cádiz

La Administración ha concedido a la empresa química Tioxide España, SA, la renovación durante un año del permiso de vertidos tóxicos en el golfo de Cádiz. Ayer justamente se cumplía el plazo del anterior permiso, que anualmente se ha venido concediendo a la empresa desde el 12 de septiembre de 1974. Esta renovación se realiza a pesar de las recientes acciones desarrolladas en agosto por la organización ecologista internacional Greenpeace impidiendo el vertido diario de unas 1.000 toneladas de residuos de dióxido de titanio en el mar, a 35 millas de las costas onubense y gaditana.

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La Administración ha concedido a la empresa química Tioxide España, SA, la renovación durante un año del permiso de vertidos tóxicos en el golfo de Cádiz. Ayer justamente se cumplía el plazo del anterior permiso, que anualmente se ha venido concediendo a la empresa desde el 12 de septiembre de 1974. Esta renovación se realiza a pesar de las recientes acciones desarrolladas en agosto por la organización ecologista internacional Greenpeace impidiendo el vertido diario de unas 1.000 toneladas de residuos de dióxido de titanio en el mar, a 35 millas de las costas onubense y gaditana.

Con fecha 10 de septiembre, la Dirección General de Marina Mercante remitió un télex a la comandancia militar de Marina de Huelva autorizando la renovación del permiso de vertidos tóxicos procedentes de Tioxide España, SA, en el golfo de Cádiz. Una operación que desde hace más de 10 años realizan diariamente los barcos Nerva y Niebla, pertenecientes a la naviera Auxtramarsa, y que fue objeto de las denuncias de Greenpeace dentro de su campaña Salvad el Mediterráneo.A mediados del mes de agosto, el buque Sirius de la organización ecologista internacional interceptó en varias ocasiones los barcos de vertidos Nerva y Niebla, impidiendo que durante una semana se arrojaran a las aguas del golfo de Cádiz más de 4.000 toneladas de sustancias procedentes de residuos de dióxido de titanio y óxido sulfúrico.

Los componentes de Greenpeace se encadenaron entonces a las tuberías de vertidos de estos barcos. Según los datos facilitados por la coordinadora ecologista de Huelva, se han depositado ya en un área de 230 millas cerca de 4,5 millones de toneladas de residuos químicos, con el consiguiente perjuicio para la fauna marina.

Estudio de contaminación

La renovación del permiso de vertidos coincidió justo un día después de que el buque Cornides Saavedra, de la secretaría general de Pesca Marítima, a través del Instituto Español Oceanográfico, finalizara un estudio de contaminación de las aguas de esta zona del golfo. Durante los días 4 al 9 del presente mes, el barco de la Administración desarrolló un programa de seguimiento de la contaminación de la ría de Huelva y del impacto que sobre el medio marino tiene el vertido de la empresa Tioxide España, SA, que realiza en el golfo de Cádiz. La orden de operaciones de esta campaña se decidió el 28 de julio, y fueron recogidas diversas muestras de sedimentos sin que hasta el momento se conozcan los resultados finales del programa.Luis Pérez Rjas, subdirector de seguridad marítima de la Dirección General de Marina Mercante, ha manifestado que, a pesar de no conocerse los resultados de los análisis llevados a cabo por el buque Cornides Saavedra, "éstos no son preceptivos para realizar la renovación del permiso de vertidos a Tioxide". Según Pérez Rojas, la nueva concesión se ha realizado "de acuerdo con el cumplimiento de la empresa en las obligaciones que España tiene, contraídas internacionalmente dentro de los convenios de Oslo y París sobre previsión de contaminación marina por vertidos desde barcos y desde fuentes terrestres".

La dirección de Marina Mercante exigió a la naviera Auxtramarsa, propietaria de los buques Nerva y Niebla, un detenido estudio de sus actividades. Estudio que fue presentado a principios del presente año y posteriormente ante los organismos internacionales.

El subdirector de seguridad marítima ha puntualizado, no obstante, que, pese a la intención de Tioxide de que se le renovara el permiso de vertidos durante los dos próximos años, sólo se le ha concedido por el plazo de uno "en función de los cambios que de año en año se producen en las normativas internacionales sobre previsión de la contaminación marina".

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