Reunión de expertos para 'aprender a respetar' el teatro en América Latina

Sin concesiones a los aspectos no fundamentales, aunque quizá más atractivos para el gran público, una treintena de conferenciantes, especialmente becados, especialistas en el teatro contemporáneo en España y América Latina, se han reunido en Santander para participar en el curso organizado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, con el objeto de aprender a respetar el proceso estético, en el campo teatral de cada país, condicionado por factores propios de desarrollo cultural e histórico-sociales.El curso, dirigido por el profesor de la Escuela Superior de Arte Dramático y director d...

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Sin concesiones a los aspectos no fundamentales, aunque quizá más atractivos para el gran público, una treintena de conferenciantes, especialmente becados, especialistas en el teatro contemporáneo en España y América Latina, se han reunido en Santander para participar en el curso organizado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, con el objeto de aprender a respetar el proceso estético, en el campo teatral de cada país, condicionado por factores propios de desarrollo cultural e histórico-sociales.El curso, dirigido por el profesor de la Escuela Superior de Arte Dramático y director de la revista especializada Primer acto, José Monleón, tiene según éste, tres niveles de trabajo: el de la información y el debate, las exposiciones de carácter académico y el aspecto práctico, realizado a través de la puesta en práctica del taller teatral del director brasileño, exiliado en Francia, Augusto Boal.

Para José Monleón, el teatro latinoamericano, que no puede considerarse como un todo, a pesar de elementos que le son comunes, "adquiere profundas diferencias entre un país y otro".

"No es un teatro de grandes textos, ni de autores reconocidos, sino un teatro experimental; no es, por supuesto", añade, "el teatro que se hace en Madrid, pero ello no quiere decir que no tenga tanta importancia o más que el que realizamos aquí". Condicionado por la defensa ante una colonización cultural, de la penetración del teatro a la europea o proveniente de Estados Unidos, al que sólo accede la pequeña burguesía, el teatro latinoamericano, en opinión de Monleón, determinado por el movimiento liberador existente, penetra en el interior de los países.

Diferencias

Las diferencias, no obstante, subsisten entre los países, y así Monleón enfrenta el teatro que se hace en Venezuela, con un régimen democrático y un nivel de libertades públicas, al que se hace en Chile, en una situación totalmente contraria. Delimitación que no es evidente entre países con regímenes autoritarios y democráticos, como es el caso, también citado por el director del curso, del teatro en Argentina, "donde, con un nivel de represión y falta de libertades importante, se da un nivel estético teatral muy alto".

En relación con el teatro español, Monleón rechazó que se esté viviendo un período de baja creación de autores españoles. "Se están estrenando muchas obras de autores contemporáneos españoles, pero, por alguna razón, sus estrenos pasan inadvertidos, se hacen en malas condiciones y por eso la imagen que resulta es que no hay teatro español. Desde la muerte de Franco el número de obras y autores españoles que estrenan ha aumentado, tanto en cantidad como en calidad, aunque sí es cierto que en muchas ocasiones han sido menospreciados por la crítica especializada, maltratados e ignorados". Para Monleón, el mundo conservador español "ha creado cierta falacia en torno a que el teatro español era antifranquista, por lo que ahora, superada esa situación, no tiene sentido y está pasado. Si se viera ese teatro se comprobaría que esa teoría no es cierta".

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