Un Ayuntamiento de Tenerife retira los instrumentos a los músicos municipales

Alrededor de medio millar de personas se manifestó en el municipio de Candelaria, localidad del sur de la isla de Tenerife, en que se encuentra emplazada la patrona del archipiélago, respondiendo así a una convocatoria del centro cultural Las Candelas, para protestar por el acuerdo plenario del Ayuntamiento del lugar, gobernado por el PSOE, de retirar a la banda de música de dicha sociedad los instrumentos que son propiedad de la Corporación municipal y que utiliza la misma en sus conciertos y clases de solfeo desde su creación, hace ocho años.

Los manifestantes, encabezados por los...

Alrededor de medio millar de personas se manifestó en el municipio de Candelaria, localidad del sur de la isla de Tenerife, en que se encuentra emplazada la patrona del archipiélago, respondiendo así a una convocatoria del centro cultural Las Candelas, para protestar por el acuerdo plenario del Ayuntamiento del lugar, gobernado por el PSOE, de retirar a la banda de música de dicha sociedad los instrumentos que son propiedad de la Corporación municipal y que utiliza la misma en sus conciertos y clases de solfeo desde su creación, hace ocho años.

Los manifestantes, encabezados por los miembros de la banda de música, combinaron sus gritos de «El pueblo unido jamás será vencido» y «No queremos patronato, queremos sociedad cultural», con los aires folklóricos de un grupo ataviado con el traje típico, que se solidarizó con la acción.

La Corporación ha enviado al centro cultural un requerimiento de la alcaldía para la devolución de los instrumentos, cuyo plazo ya ha expirado.

«Nosotros no vamos a devolver nada, y si nos reclaman los instrumentos por vía judicial tendrán que meternos en la cárcel a los cuatrocientos que firmamos un escrito contra tal medida. Como se fuerze la situación, aquí puede haber otro Fuenteovejuna», declaró un portavoz de dicho centro en conflicto. En opinión del alcalde, Miguel Angel González Marrero, la banda de música debe pasar a ser controlada por un patronato municipal, debido a que los instrumentos de música son propiedad del Ayuntamiento y a que éste ha invertido en dicha agrupación, hasta el momento, alrededor de siete millones de pesetas. «En ningún momento estamos dispuestos a permitir que con el dinero del pueblo se financie una entidad privada».