Schmidt y Brandt, partidarios de un equilibrio armado entre las superpotencias

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El canciller de la República Federal de Alemania (RFA), Helmut Schmidt, y su predecesor en el cargo y actual presidente del Partido Socialdemócrata y de la Internacional Socialista, Willy Brandt, han coincidido en sendas declaraciones efectuadas este fin de semana en la necesidad de un "equilibrio armado" entre las dos superpotencias y en la reanudación del diálogo en la cumbre entre Estados Unidos y la Unión Soviética.

Estas declaraciones se producen una semana antes de la visita que efectuará a Bonn el máximo dirigente de la URSS, Leónidas Breznev. El canciller de la RFA declaró al pe...

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El canciller de la República Federal de Alemania (RFA), Helmut Schmidt, y su predecesor en el cargo y actual presidente del Partido Socialdemócrata y de la Internacional Socialista, Willy Brandt, han coincidido en sendas declaraciones efectuadas este fin de semana en la necesidad de un "equilibrio armado" entre las dos superpotencias y en la reanudación del diálogo en la cumbre entre Estados Unidos y la Unión Soviética.

Estas declaraciones se producen una semana antes de la visita que efectuará a Bonn el máximo dirigente de la URSS, Leónidas Breznev. El canciller de la RFA declaró al periódico de Londres The Times que tratará de convencer a Breznev de la necesidad de un encuentro con el presidente norteamericano, Ronald Reagan. "Es necesario", dijo, "que se entrevisten y que cada uno de ellos pueda convencer al otro de que no es un belicista".Schmidt deplora la falta de comunicación entre las dos potencias y critica las contradictorias tomas de postura de los dirigentes norteamericanos con relación a una eventual guerra nuclear en Europa. Según el canciller federal alemán, esta situación contribuye a aumentar el miedo de los europeos y al auge de los movimientos pacifistas.

El canciller alemán dice también en la entrevista que tiene simpatía hacia los movimientos pacifistas, pero señaló que la paz no se logrará mediante "reacciones emocionales", sino manteniendo el equilibrio entre los bloques.

Con relación a la visita de Breznev, Schmidt dice que "tenemos algunas preguntas que plantear a los soviéticos; por ejemplo, por qué han desplegado cerca de 250 cohetes SS-20, cada uno de ellos con tres cabezas nucleares. Y también por qué no pueden retirar sus tropas de Afganistán".

Willy Brandt manifiesta, por su parte, en unas declaraciones al semanario socialdemócrata Vorwaeris, su rechazo hacia la propuesta del líder soviético de desnuclearizar la RFA, a cambio de la promesa de Moscú de no utilizar armas atómicas contra países que no posean este tipo de armamento. "La paz sólo podrá ser garantizada en el mundo cuando se respete el equilibrio de fuerzas entre el Este y el Oeste y cuando las dos partes renuncien por igual a las armas atómicas", declara el presidente del Partido Socialdemócrata.

Para Brandt lo importante es que las dos grandes potencias reanuden activamente las conversaciones y "creen las condiciones políticas ideales para que se ponga fin a la carrera armamentista que ellas mismas han desencadenado".

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Otro de los temas que acapara la atención ante la visita de Breznev a Bonn es el de las relaciones económicas entre la RFA y la URSS. El canciller alemán está convencido de la importancia que tiene para la distensión el reforzamiento de las mismas.

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